MADRID, 12 Dic. (EUROPA PRESS) -
Ciudadanos ha criticado que el Estado se vaya a quedar con las ocho autopistas que se encuentran en quiebra y en riesgo de liquidación, una decisión que considera una muestra clara de "capitalismo de amiguetes".
"El capitalismo de amiguetes en su máxima expresión. Cinco mil millones que no van a educación o sanidad", ha escrito en su cuenta de Twitter el responsable de Economía, Industria y Conocimiento de C's, Luis Garicano.
En la misma red social se ha pronunciado el portavoz de la formación naranja en el Congreso de los Diputados, Juan Carlos Girauta, que cree que el mensaje que está transmitiendo el Gobierno es que "si sale bien, gana el concesionario", y "si sale mal, pierde el contribuyente".
El presidente de la formación naranja, Albert Rivera, ha lamentado que el Gobierno destine dinero público a rescatar a las concesionarias mientras da luz verde a la subida de impuestos especiales como los de tabaco y alcohol, una medida ante la que Ciudadanos ya ha mostrado su rechazo.
"Mientras las clases medias pagarán más impuestos pactados por PSOE y PP, a rescatar con dinero público el desastre de las concesionarias", ha escrito en esta red social el líder de C's en relación al apoyo de los socialistas.
Según ha anunciado este lunes el ministro de Fomento, Íñigo de la Serna, el Estado va a asumir esas ocho autopistas se alcance o no acuerdo con los bancos acreedores de las vías, que soportan una deuda de unos 3.400 millones de euros. Aun así, ha asegurado que está en contacto con los bancos acreedores con el fin de buscar un acuerdo "que facilite" el rescate.
El ministro pretende retomar el plan de rescate que el anterior equipo de Fomento planteó en marzo de 2014 y que entonces no fructificó. Los 5.000 millones que menciona Garicano se refieren al importe que, según el sector, el Gobierno tendría que sacar de las arcas públicas para compensar a las empresas concesionarias de las vías por la inversión que realizaron en su construcción.
Estas críticas de dirigentes de Ciudadanos llegan una semana después de que el Ejecutivo acordara con el partido de Albert Rivera reducir el dinero que se dedicará en los Presupuestos Generales del Estado de 2017 a financiar las medidas contenidas en el pacto de investidura que el PP y C's firmaron en agosto. Entonces decidieron destinar 5.000 millones de euros a políticas sociales y de reactivación económica, pero ahora se han quedado en 3.850 millones.