MADRID 28 Mar. (EUROPA PRESS) -
La Audiencia Provincial de Madrid ha condenado a un hombre a 17 años y seis meses de prisión por matar en marzo de 2015 a su mujer, a quien durante años sometió a palizas y humillaciones continuas.
Así consta en una sentencia, a la que tuvo acceso Europa Press, que condena al procesado por la comisión de un delito de homicidio, un delito de violencia física o psíquica habitual y otro delito de amenazas. Contra la resolución cabe recurso de apelación ante el Tribunal Superior de Justicia de Madrid.
Un Tribunal Popular emitió un veredicto de culpabilidad contra el ahora condenado. En su declaración, negó los hechos y manifestó que su pareja se tiró del coche en marcha tras una acalorada discusión.
Jesús J. S. deberá abonar además en concepto de indemnización 250.000 euros al hijo de la fallecida y 70.000 a cada uno de los padres de ella.
El Tribunal del Jurado ha declarado probado, y así se recoge en la sentencia, que Jesús, durante la relación de pareja, sometió a la víctima a constantes actos de hostigamiento, controlando aspectos personales de su vida y haciéndole objeto de constantes humillaciones y menosprecios.
Además, ha considerado acreditado que sobre las 15:45 h del 11 de marzo de 2015 la pareja circulaba en la furgoneta Nissan conducida por él, haciéndolo, desde la carretera EX100 Cáceres-Badajoz, por el carril de incorporación a la Autovía A66, sentido Sevilla, a una velocidad de unos 60 km/h, manteniendo ambos una discusión.
En un momento dado de la discusión, Tamara golpeó en la nariz a Jesús, procediendo éste a detener el vehículo en el arcén y, al tiempo que le decía que le iba a quitar a su hijo, se abalanzó sobre ella y la golpeó, tratando Tamara de evitarlo con los brazos.
Ante la agresión de que era objeto por parte de Jesús, Tamara salió del vehículo por la puerta delantera derecha, alejándose en sentido contrario al de la marcha, corriendo hasta que se torció el tobillo izquierdo.
Jesús persiguió a Tamara dándole alcance y, pudiendo Jesús imaginarse que con su tal proceder acabaría con la vida de Tamara, la cogió y arrojó violentamente hacia atrás y contra el suelo, golpeándose ésta la cabeza contra el asfalto, falleciendo pocas horas después en el Hospital San Pedro de Alcántara, de Cáceres.
Tamara resultó con lesiones contusas, con componente equimótico predominante, producidas por objeto contuso de superficie lisa, y con lesiones defensivas y lesiones digitiformes producidas por la presión de dedos en el antebrazo, siendo la causa del fallecimiento un traumatismo craneoencefálico con fractura en base craneal, hemorragia intracraneal y edema y contusión encefálica.