MADRID, 24 May. (EUROPA PRESS) -
La Mesa de la Diputación Permanente del Congreso decidirá este miércoles si convoca al único órgano parlamentario que se mantiene activo tras la disolución de las Cortes para debatir la comparecencia del ministro del Interior en funciones, Jorge Fernández Díaz, por la polémica de las 'esteladas' en la Copa del Rey.
Convergència (CDC) y Esquerra Republicana (ERC) registraron el pasado jueves esta solicitud de comparecencia nada más conocerse la decisión de la Delegación del Gobierno en Madrid de impedir la entrada de las banderas independentistas catalanas en la final de la Copa del Rey entre el Barcelona y el Sevilla, una decisión que finalmente el juez dejó sin efecto.
Tanto CDC como ERC mantienen esa exigencia de explicaciones a Fernández Díaz porque defienden que la 'estelada' es "un símbolo democrático" y que querer prohibirla, además de ser una decisión "ridícula" e "intolerante", no hace más que contribuir al deterioro de la relación Cataluña-España. "No se puede tener una relación normal con un Gobierno que pretende saltarse las leyes por razones políticas", en palabras del portavoz convergente, Francesc Homs.
FUNCIONES LIMITADAS DE LA DIPUTACIÓN
En un escenario ordinario, una petición firmada por dos grupos parlamentarios basta para reunir la Diputación Permanente, pero disueltas las Cortes las funciones de este órgano están muy limitadas.
Así las cosas, la solicitud de los dos grupos independentistas será analizada este miércoles por la Mesa de la Diputación Permanente, que encabeza el presidente de la Cámara Baja, Patxi López, y en la que el PP es minoría: tiene dos puestos frente a otros dos del PSOE y uno de Ciudadanos.
En esa reunión, sus miembros deberán resolver si convocan a la Diputación Permanente para que debata la posibilidad de que el ministro del Interior ofrezca allí las correspondientes explicaciones sobre las banderas estrelladas.
Y aunque se convoque a la Diputación Permanente, no parece probable que Fernández Díaz llegue a comparecer teniendo en cuenta que el Gobierno viene manteniendo su negativa a ser sometido a control parlamentario por una Cámara que eligió al actual Gobierno.