SAN SEBASTIÁN 14 Sep. (EUROPA PRESS) -
El Colectivo de Víctimas del Terrorismo, Covite, ha recriminado al alcalde de Valencia, Joan Ribó, su "absoluto desinterés e indiferencia" a la propuesta que le trasladó el colectivo el pasado 27 de abril, a través de una carta, de colocar placas en memoria de cinco víctimas del terrorismo asesinadas en la ciudad, en los lugares donde fueron asesinadas.
La presidenta de Covite, Consuelo Ordóñez, ha asegurado que se ha puesto en contacto en varias ocasiones con el gabinete del alcalde para tratar con él la iniciativa. "Siempre me respondieron de forma amable y correcta asegurándome que el alcalde había recibido la carta y que se pondrían en contacto conmigo, pero no lo han hecho", ha explicado.
Covite ha considerado una "cuestión de justicia y de responsabilidad ética y política" que se recuerde a las víctimas en los lugares donde, en los últimos cincuenta años, se han perpetrado atentados terroristas. "La desidia institucional ha empujado a que sean las propias víctimas las que se vean en la obligación de salvaguardar la memoria de los asesinados", ha subrayado.
Ordóñez ha incidido en que, en el caso de la ciudad de Valencia, han comprobado que "esa desidia por recordar a las víctimas del terrorismo sigue muy presente". En esa línea, ha recordado que las personas que han fallecido en atentados terroristas en Valencia han sido seis.
"Una de ellas Manuel Broseta - asesinado por ETA el 15 de enero de 1992-, ya tiene un monolito en su memoria en el lugar donde fue asesinado, por lo que 'solo' haría falta colocar cinco placas, lo cual no requeriría prácticamente ningún esfuerzo. Pues bien, ni ese pequeño esfuerzo ha sido capaz de hacer el alcalde, por el momento", ha lamentado.
Desde Covite han asegurado que seguirán insistiendo para que las víctimas del terrorismo asesinadas en Valencia tengan su placa, como también han hecho en otras ciudades y localidades, tanto del País Vasco y Navarra como del resto de España, como parte de su iniciativa 'Una víctima, una placa'.
Finalmente, el colectivo ha detallado que las víctimas del terrorismo asesinadas en Valencia cuya placa ha solicitado son Juan Antonio Pérez Herrero, asesinado en un atentado terrorista el 28 de mayo de 1990 que se cerró sin determinarse la autoría del mismo; Josefina Corresa Huerta, asesinada por ETA el 16 de diciembre de 1995; Antonio Castelló Vital, asesinado por los GRAPO el 26 de enero de 1979; José Edmundo Casañ Pérez Serrano, asesinado por ETA el 4 de marzo de 1991; y Emilio García Martínez, asesinado por los GRAPO el 19 de abril de 1983.