MADRID, 26 (EUROPA PRESS)
La Policía Nacional ha desmantelado un 'call center' en un chalé de Alicante con 73 detenidos de una organización criminal que dejó más de 2.000 víctimas mediante estafas con la modalidad de la 'extorsión del sicario' o la del 'hijo en apuros', que eran captados aprovechando que previamente habían visitado páginas web falsas de citas sexuales. También se dedicaban al tráfico de drogas a pequeña escala y el blanqueo de capitales.
Se trata de una organización criminal "tremendamente activa", ya que estaba operativa las 24 horas del día, según ha explicado en rueda de prensa desde el Complejo Policial de Canillas en Madrid el jefe de la UDEV, José Ángel González Morán, gracias a que utilizaban a captadores, 'mulas' y 'voces' dedicadas a este tipo de estafas.
MENSAJES OFRECIENDO "DULCE UNIVERSITARIA"
En concreto, contactaban con personas que previamente habían visitado páginas web falsas de citas en el que se ofrecía el teléfono de una supuesta chica con mensajes 'gancho' como "dulce universitaria que te hará vivir experiencias únicas".
Luego, contactaban con la víctima para extorsionarla haciéndose pasar por sicarios de Europa del Este, usando para ello 'bots' automatizados y vídeos conseguidos por Internet de violencia explícita, con lo que conseguían atemorizar a muchas para que accedieran a realizar pagos, bajo la amenaza de que difundieran que eran clientes de páginas web de citas.
La Policía ha realizado 22 registros de forma simultánea en Benissa (Alicante), Valencia y Tarrasa (Barcelona), interviniendo armas de fuego, machetes y se ha logrado el bloqueo de 129 cuentas bancarias, tres viviendas y más de 20 vehículos.
La primera denuncia se interpuso en una comisaría de Madrid a principios de 2024 y la víctima llegó a pagar 6.000 euros. Se estima que la red ha podido obtener más de dos millones de euros en beneficios -se ha intervenido 250.000 euros--, usando para ello empresas ficticias y de peluquerías ubicadas en Valencia.
EL LÍDER, LA MADRE Y SU ABUELA
Como líder de todo el entramado se ha identificado a un hombre con antecedentes en este tipo de delitos que tenía cuatro viviendas donde vendían sustancias estupefacientes.
Utilizaba dos empresas para justificar los ingresos que se estiman superiores a dos millones de euros. Una de esas mercantiles se dedicaba a la realización de supuestas actividades agrícolas, donde tenían asalariadas varias 'mulas' recibiendo una contraprestación mensual aparentando así una fuente de negocio lícita.
La administradora era la madre del líder, que actuaba como testaferro de una de estas empresas, recibiendo a su vez el dinero de otro miembro de la familia, la abuela, quien se encargada de recoger el dinero de los domicilios.
La operación se saldó con 73 personas detenidas --64 en Valencia, siete en Benissa y dos en Tarrasa-- como presuntos responsables de los delitos de pertenencia a organización criminal, extorsión, estafa, blanqueo de capitales, tráfico de drogas y usurpación del estado civil. Siete han entrado en prisión y se han incautado alrededor de 250.000 euros, 60.000 en criptomonedas.
La Policía tiene constancia de 85 denuncias, pero la investigación continúa abierta puesto que se estima que podría haber más de 2.000 víctimas.