La Fiscalía acepta la suspensión de la condena a cambio de que no se ausenten de la comunidad autónoma en la que residen sin autorización del juez
MADRID, 7 Nov. (EUROPA PRESS) -
Los dos acusados de autoadoctrinamiento y capacitación yihadista a jóvenes y menores de edad a través de la red social Instagram han reconocido los hechos este jueves ante el tribunal de la Audiencia Nacional y han aceptado la pena de dos años de cárcel.
Los dos acusados, Hugo C. y Salim H., no entraran sin embargo en prisión dado que la Fiscalía ha propuesto suspender la condena con la condición de que no abandonen la comunidad autónoma donde residen sin autorización judicial.
Durante la vista, que ha durado escasos minutos, ambos acusados han subrayado ante el tribunal que tenían conocimiento del acuerdo de conformidad al que se ha llegado con el Ministerio Público, y el fiscal del caso sólo ha ratificado su escrito de acusación.
El tribunal ha dictado sentencia 'in voce' y ha declarado culpables a ambos de un delito de autoadoctrinamiento y capacitación terrorista, y les ha impuesto la pena de 2 años de prisión, inhabilitación absoluta y especial para los ámbitos docente, deportivo y tiempo libre por 10 años y libertad vigilada de otros 3 años. Además, ha acordado el cierre de los perfiles de redes sociales de ambos.
En su escrito de acusación, recogido por Europa Press, la Fiscalía solicitaba condenar a Hugo C. y Salim H. por los citados delitos que habrían cometido en la aplicación Instagram, donde "compartían y difundían contenidos que, en su gran mayoría", justificaban a los grupos terroristas DAESH y Al Qaeda, "elogiando a los combatientes terroristas".
El Ministerio Público sostenía que "ambos se encontraban inmersos en un proceso de radicalización siendo poseedores de una gran cantidad de material multimedia obtenido de las distintas plataformas, y que hacía referencia a la yihad, a los muyahidines, obteniendo material apologético directamente editado y publicitado por DAESH".
"Todo ello con el designio deliberado de infundirse, inbuirse o inculcarse y reafirmarse en el ideario de las ya referidas organizaciones terroristas, especialmente del DAESH que tiene como finalidad última establecer el califato global bajo la vigencia de la Sharia", detallaba la Fiscalía.
El escrito añadía que uno de los acusados "tenía en su poder material multimedia acerca de la preparación de explosivos y uso de armas, editados y difundidos por DAESH y, a través de la cuenta" de Instagram "publicitaba el eslogan 'baqiyah baqiyah' conocido como el grito de guerra de la organización terrorista".
El segundo acusado, según la Fiscalía, seguía al primero "en sus acciones alineándose con los propósitos de éste y por lo tanto, de las organizaciones terroristas yihadistas".
Fue en agosto de 2023 cuando la Guardia Civil procedió a la detención de Hugo C. en Valencia y de Salim H. en Benavente (Zamora). El Instituto Armado aseguró entonces que la audiencia sobre la que los investigados focalizaban sus actividades de adoctrinamiento terrorista estaba formada mayoritariamente por jóvenes de 18 años y menores de edad.