MADRID 25 Nov. (EUROPA PRESS) -
El Gobierno ha enviado cuatro hidroaviones para colaborar en la extinción de los incendios forestales que están asolando desde hace varios días distintos puntos del norte y el sur de Israel, en respuesta a la petición que había realizado el Ejecutivo del país hebreo.
Según ha informado este viernes el Departamento de Seguridad Nacional en su página web, el comisario europeo de Ayuda Humanitaria y Gestión de Crisis, Christos Stylianides, había solicitado a los Estados miembros su ayuda en la lucha contra incendios en Israel a través del Mecanismo Europeo de Protección Civil.
Los aviones Canadair enviados por España están gestionados por el Ministerio de Agricultura y Pesca, Alimentación y Medio Ambiente, pero pertenecen al 43 Grupo del Ejército del Aire. Están diseñados específicamente para incendios forestales y pueden operar tanto desde tierra como desde el agua. Cuentan con una capacidad de descarga de 5.500 litros, también de agua de mar, y pueden operar con vientos superiores a los 30 nudos.
Además de España, otros países de la UE como Grecia, Italia, Croacia y Chipre han respondido a la petición. De fuera del ámbito comunitario, Rusia y Turquía también están colaborando con el envío de un total de 10 medios aéreos, Azerbaiyán se ha comprometido con un hidroavión, Egipto aportará dos helicópteros y Jordania enviará camiones antiincendios y personal especializado. La Autoridad Palestina también ha ofrecido personal y apoyo logístico.
FUERTES VIENTOS Y POCAS PRECIPITACIONES
Esta cadena de incendios forestales afecta a Israel desde el pasado martes y los fuegos se han visto agravados por los fuertes vientos que se están registrando. Todo ello en un contexto climatológico adverso debido a la acusada ausencia de precipitaciones este otoño.
La Policía israelí ha detenido para su interrogatorio a al menos una docena de personas supuestamente relacionadas con esta ola de incendios, que han obligado a la evacuación de decenas de miles de personas.
Los focos son múltiples y se concentran en Beit Meir --las colinas de Jerusalén--, cerca de Kiryat Gat, en el sur del país; y en el norte cerca de Harashim y por toda la región de Haifa, en lo que se trata de la quema más grave desde los históricos incendios de hace seis años, los peores de la historia del país, y que se cobraron las vidas de 42 personas.