MADRID, 4 May. (EUROPA PRESS) -
La ministra de Asuntos Exteriores, UE y Cooperación, Arancha González Laya, ha hecho un llamamiento a respetar el Estado de derecho y la independencia judicial en El Salvador, donde la nueva Asamblea Nacional controlada por partidarios del presidente, Nayib Bukele, ha cesado este fin de semana a los jueces del Constitucional y al fiscal general.
González Laya ha asegurado que el Gobierno está siguiendo la situación en el país centroamericano y está en contacto con las autoridades, a las que ha trasladado un "llamamiento al respeto del Estado de derecho, a la independencia judicial y a la separación de poderes".
En este sentido, en rueda de prensa con su homólogo de Serbia, Nikola Selakovic, ha indicado que además de seguir "atentos" a la evolución de la situación el Gobierno también está trabajando ya con sus socios de la UE y en la región.
La ministra de Exteriores ha insistido en que "Estado de derecho, independencia judicial y separación de poderes (son) principios fundamentales para España pero también para un país amigo como es El Salvador".
El paso dado por la nueva Asamblea Nacional salvadoreña, que controla el partido de Bukele, ha sido duramente criticado ya por Estados Unidos, la UE y la ONU.
Precisamente, la Alta Comisionada de las Naciones Unidas para los Derechos Humanos, Michelle Bachelet, ha condenado este martes la destitución de los magistrados de la Sala de lo Constitucional de la Corte Suprema de El Salvador, así como del fiscal general, y ha alertado de que esto "socava gravemente" la democracia y el Estado de derecho en el país.
En un comunicado, ha recordado que la separación de poderes es "la piedra angular de cualquier democracia" y ha matizado que "debilitar el control que uno ejerce sobre el otro provoca la erosión de los pilares del Estado de derecho y, por ende, del sistema democrático de un país".
Las críticas, sin embargo, no parecen haber hecho mella en Bukele, quien este domingo sostuvo que los diputados solo siguen un mandato popular que no les puso en el poder para "negociar".
"El pueblo no nos mandó negociar. Se van. Todos", señaló en su cuenta de Twitter, en un mensaje en el que también dijo que llevan "30 años" para expulsar al "régimen" que ha tenido al país "en la miseria, en la corrupción, en la inseguridad y en la desesperanza". "Negociaban con la vida del pueblo y ordenaban asesinatos desde las instituciones", denunció.