Sostiene que el exministro presentó los informes por los que le pagaron y que fueron "a plena satisfacción"
MADRID, 18 (EUROPA PRESS)
El que fuera secretario general de Telefónica de 2013 a 2015, Ramiro Sánchez de Lerín, ha sostenido este jueves que se decidió contratar los servicios de asesoramiento con el exministro Rodrigo Rato en 2012 y 2013 porque la situación del mundo financiero era "complicado" y que le pareció "de lo más normal" que la facturación por esos informes que existieron se hiciera a través de Kradonara, empresa de Rato.
Así lo ha señalado a preguntas de su abogada, se ha negado a responder a la Fiscalía, en el juicio que se celebra en la Audiencia Provincial de Madrid contra Rato por el incremento presuntamente ilícito de su patrimonio. Este jueves, el tribunal ha terminado de escuchar a los acusados y ha acordado que las sesiones continuarán el 26 de abril con las conclusiones de las partes.
Sánchez de Lerín ha explicado que Telefónica "se planteó la necesidad de tener un asesoramiento macroeconómico" y entendió que Rato "era una persona de acreditado conocimiento en esa materia".
Así, él mismo mandó un modelo de contrato al que era administrador de Kradonara, Domingo Plazas, siguiendo las indicaciones de Rato, y ha matizado que ese contrato tipo se lo había pasado a su vez la asesoría jurídica de la multinacional.
En este sentido, ha incidido en que firmar con una sociedad en vez de con Rato le pareció "de lo más normal", y ha apuntado que "más del 90 por ciento de los contratos de asesoramiento eran con personas jurídicas" por lo que no les suspuso "ninguna sorpresa". "Fue un contrato tan usual o habitual como cualquier otro", ha recordado.
Además, ha comentado que ese acuerdo dejaba claras quiénes eran las partes y cuáles eran las prestaciones, y ha subrayado que "la realización de los informes macroeconómicos se hicieron en tiempo y forma, y a plena de satisfacción".
La Fiscalía, en su escrito de acusación, sostiene en cambio que esos servicios profesionales los facturó Rato a través de sociedades "aprovechando las bases imponibles negativas que las mismas arrastraban".
UN ESFUERZO "EXTRAORDINARIO" DE ZENITH
Este jueves han declarado también en calidad de acusados directivos de las agencia de medios Zenith Media, que han negado ante el tribunal que el consultor externo de Bankia Alberto Portuondo, al que la Fiscalía achaca desvío de comisiones hacia el exministro Rodrigo Rato, participara en el proceso de selección de su empresa por parte de la entidad. Además han relatado que tuvieron que hacer un esfuerzo "extraordinario" para ganar el concurso.
Sergio L., el directivo de mayor rango de esa agencia, ha explicado que si bien con antelación no conocía a Alberto Portuondo, se lo presenta el presidente el Grupo Publicís en España, el ya fallecido Miguel Ángel Furones. En ese encuentro, ha recordado, ambos le explican que las empresas del primero y las agencias de publicidad Publicís y Zenith tenían un acuerdo de referencia cruzada para lograr nuevos negocios y que "la agencia prescriptora recibiría una parte de los ingresos por parte de la que hubiese ganado".
Ha explicado que tras recibir el briefing para participar en el concurso de Bankia con el fin de hacerse con la campaña de lanzamiento de la marca, su agencia realizó "una propuesta extraordinaria", y no solo por el poco tiempo que hubo para prepararla sino porque "hubo un esfuerzo muy grande por parte de todos los miembros de la agencia".
Al hilo, ha subrayado que en ningún momento participó en esa preparación Portuondo y que su intervención se limitó a apoyarles para poder llegar a ser seleccionados para participar en el concurso. "Él se circunscribió únicamente a eso. A partir de ahí ya no hizo absolutamente nada más para nosotros", ha recordado.
Con todo, sí que ha apuntado que vio a Portuondo en la presentación que le hicieron al cliente Bankia, junto a otras siete personas, pero que le aclaró que fue sólo porque le habían pedido que estuviera, y que no participaba en el proceso de selección.
Otro directivo de Zenith --un coordinador-- que también está investigado en esta causa, Fernando R.V., ha explicado que él no tuvo relación ni con Bankia, ni con las gestiones previas para ser convocados al concurso, ni con la preparación de los trabajos o con la presentación. "Tampoco tuve ninguna relación en los cinco años en los que duró la relación contractual entre Zenith y Bankia", ha añadido.
Sí que supo por su superior que el acceso al concurso fue gracias a la labor de un consultor externo, Portuondo, pero él nunca tuvo relación con él, aunque le constaba que Zenith fue convocada al concurso. Sobre su firma para el contrato de Albisa --la empresa de Portuondo a la que abonaban las comisiones pactadas previamente--, ha explicado que no hubo presencia física para rubricar ese documento y que firmó porque formaba parte de sus funciones en la agencia.
EL CONCURSO NO ESTABA GANADO
Cándida R., que fue directora general de Zenith Media, ha explicado que fue en 2010 cuando supo por su superior que existía la posibilidad de acceder a ese concurso, pero ella hizo "cero" al respecto. "No hice absolutamente nada, (...) pero era un concurso importante", ha matizado.
Ha recordado que fue en diciembre de 2010 cuando les envían el briefing para la presentación a Bankia, y ha recordado que era "extenso y exigente" y que debían dar respuesta en enero de 2011.
Al hilo, ha resaltado que nadie "en absoluto" le transmitió que el concurso lo iban a ganar seguro, y de hecho ha resaltado que el esfuerzo fue "tremendo" por parte de todo el equipo de Zenith. Sobre la presentación, ha señalado que desconocía en ese momento que estaba Portuondo, aunque con posterioridad le comentaron que sí había estado.
En febrero de 2011 supo que habían ganado y tuvieron que poner a trabajar en el proyecto "de forma inmediata" a pesar de que el contrato no estaba firmado aun. "Es habitual pero no nos gusta", ha explicado, para comentar luego que siempre la prioridad es firmar los contratos cuanto antes.
Sobre Portuondo y su empresa Albisa, Rodríguez ha explicado que desconocía la existencia de ambos hasta inicios de 2011 cuando tiene que firmar el contrato para las comisiones, aunque ha matizado que no participó ni en la redacción ni en las condiciones del mismo. Pero firmó, siguiendo los protocolos, porque tenía "firma mancomunada" y venía ya rubricado por su superior.
Tras la exposición de conclusiones del próximo 26 e abril, el tribunal volverá a reunirse el 6 de mayo para los informes finales. Cabe recordar que Rato está acusado de 11 delitos contra la Hacienda Pública, blanqueo de capitales y corrupción en los negocios. Anticorrupción interesa para él una pena de aproximadamente 70 años de cárcel por haber defraudado más de 8,5 millones en la gestión de su patrimonio.