MADRID 19 Jul. (EUROPA PRESS) -
El exdirigente de CDC David Madí ha declarado este martes ante la Fiscalía Europea para aclarar la conversación telefónica que tuvo en 2020 poco después de una supuesta reunión con 60 empresarios de Foment del Treball y el exjefe del gabinete de Pedro Sánchez, Iván Redondo, en la que se habló presuntamente del reparto de los fondos europeos de Next Generation UE --unos 140.000 millones de euros--.
"He esclarecido cualquier malentendido y ha quedado muy claro", ha asegurado el propio Madí tras la declaración, adelantando a su vez que solicitarán el archivo de la investigación a la mayor brevedad posible.
Su comparecencia ante la Fiscalía Europea llega después de que la Guardia Civil interceptase en la operación 'Voloh' una llamada telefónica entre él y Joan Ferran, un socio de RSM Spain Consultores y pariente suyo, en la que se comentaron "aspectos de la gestión de fondos europeos para la recuperación" y que "no hay ningún acuerdo para repartirse dichos fondos". El propio Ferran también ha declarado este martes.
"SERÁ UNA MERIENDA DE NEGROS"
En la llamada, Madí manifestaba: "Hay que establecer un canal para entrar, yo me vi, con Foment, formo parte de Foment, y tuvimos una reunión en pequeño comité con Iván Redondo; esto será una merienda de negros, son 140.000 millones".
El Juzgado de Instrucción 1 de Barcelona consideró que se podía tratar de un delito de fraude en subvenciones europeas. De acuerdo con la legislación, que obliga a derivar a la Fiscalía Europea indicios de este tipo, el magistrado envió la transcripción de la llamada interceptada por la Guardia Civil y otras diligencias relacionadas al citado órgano.
Con todo, la defensa de Madí y el fiscal de anticorrupción alegaron que no había indicios de delito y explicaron que el otrora dirigente de CDC hablaba de cómo "presentar proyectos para conseguir fondos europeos".
"SOSPECHAS FUNDADAS"
La resolución de la Fiscalía Europea, recogida por 'El Periódico de España', sostiene que la Audiencia de Barcelona ya declaró que en el auto del juez se "exponen sospechas fundadas" sobre la presunta comisión de "ilícitos referentes a corrupción político-económica".
"Es decir, a presuntos desvíos de caudales público y blanqueo de capitales, entre otros, y más concretamente presuntos fraudes de subvenciones en los que participaría David Madí, junto con el otro investigado", expone el citado medio.
La normativa que regula la Fiscalía Europea establece que "desde que resulten de las actuaciones indicios que permitan atribuir la realización del hecho punible a una persona determinada", se debe citar al encausado en una primera comparecencia para comunicarle que la investigación se dirige contra ella, así como su calificación jurídica provisional para tomarles declaración.
Este ha sido el objetivo de la citación tanto de Madí como de Ferran, la primera desde que la Fiscalía Europea comenzase a indagar en la llamada telefónica interceptada por el Instituto Armado.