MADRID, 25 Ene. (EUROPA PRESS) -
El Gobierno ha informado de que se ha abierto un procedimiento sancionador a dos vigilantes del control de seguridad del Aeropuerto de El Prat, en Barcelona, por negarse a identificarse el pasado 7 de octubre ante los agentes policiales que acompañaban al presidente de Ciudadanos, Albert Rivera, después de que estos rechazaran que el político pasase por los detectores de explosivos.
Respondiendo a una pregunta planteada por escrito por el senador de Compromís Carles Mulet, el Gobierno ha indicado que "se ha iniciado la apertura de un procedimiento sancionador por una presunta actuación irregular a los dos vigilantes de seguridad que prestaban servicio en el filtro de control de seguridad" de El Prat, cuyos detectores "son solo para explosivos", no para drogas.
Concretamente, el Ejecutivo ha explicado que ese expediente sancionador es consecuencia del "incumplimiento del deber de identificarse ante los agentes policiales", mostrando su título de vigilante de seguridad o carnet de vigilante de seguridad, una infracción tipificada como falta muy grave en la Ley de Seguridad Privada.
Además, uno de los vigilantes podría ser sancionado igualmente "por no llevar visible la placa-distintivo, incumpliendo su obligación de uniformidad", tipificada como falta leve. Los expedientes han sido elevados a la Delegación del Gobierno en Cataluña.
En la primera contestación que dio al senador de Compromís sobre este asunto, en diciembre, el Gobierno dijo que, según la información aportada por la empresa de seguridad, el desacuerdo se produjo cuando un miembro de la Policía Nacional y escolta de Rivera, acompañado de otro agente de la Policía Nacional uniformado, indicó a los vigilantes que se responsabilizaba de la seguridad del líder de Cs hasta la salida de su avión.
En el mismo sentido, la formación naranja detalló en octubre que Rivera "siguió en todo momento la instrucción de la Policía Nacional en dicho proceso". "Una vez pasado el control de seguridad, los policías nacionales que acompañaban a Rivera se identifican ante el vigilante y le dan instrucción de dejarle continuar bajo su responsabilidad", de manera que el dirigente de Cs "cumplió con las órdenes indicadas por criterio exclusivo de los agentes", afirmó.
LA GUARDIA CIVIL NO FUE INFORMADA DE NINGUNA INCIDENCIA
El Gobierno ha señalado que los procedimientos aeroportuarios establecen "la obligación de los pasajeros a someterse a una inspección de seguridad para evitar la introducción de objetos prohibidos en la zona restringida de seguridad y a bordo de una aeronave".
En los aeropuertos de la red de AENA, la Guardia Civil es la que tiene la responsabilidad de los filtros de seguridad y AENA es quien aporta el servicio de vigilantes privados, que desarrollan sus labores de inspección bajo la supervisión del Instituto Armado. "No obstante, la Guardia Civil no recibió comunicación de incidencia alguna al respecto por ninguna de las partes intervinientes", ha añadido el Ejecutivo en su respuesta.