Abogan por crear infraestructuras éticas con el objetivo de fortalecer al sector público en su integridad frente a las prácticas corruptas
MADRID, 15 Ene. (EUROPA PRESS) -
Un informe elaborado por Esade-PwC propone fortalecer el consejo de Transparencia y Buen Gobierno, impulsado por la exvicepresidenta Soraya Sáenz de Santamaría, como órgano independiente para alcanzar una Administración pública "íntegra y centrada en el ciudadano". Apunta que se debe dotar a ese órgano de recursos legales y organizativos para sea efectivo y no simplemente testimonial.
Según el informe 'Administración 2030: una visión transformadora', presentado en Esade Madrid, y elaborado por el exministro de Justicia con el PP Rafael Catalá y Óscar Cortés, coordinador de comunicación digital del Ayuntamiento de Madrid, dentro de las actividades del Observatorio para la Transformación del Sector Público Esade-PwC, ese fortalecimiento permitiría al consejo ser más eficiente en su acción de fiscalización de las políticas de transparencia.
Además presentan otras cuatro propuestas para que la Administración gane en transparencia, entre las que destaca lograr un lenguaje más comprensible y no tanto de manual. "La calidad institucional mejorará si la transparencia se entiende como ofrecer a la ciudadanía una información que sea útil y comprensible, simple y clara", añaden los autores.
En este sentido, indican que la transparencia no debe consistir en la publicación de grandes cantidades de información con un lenguaje incomprensible. Y añaden que se debe impulsar una 'Estrategia Nacional para la integridad en el sector público y la lucha contra la corrupción' que posibilite una coordinación entre administraciones en esta materia.
"Las administraciones deben trabajar coordinadamente en la construcción de una infraestructura de integridad pública que aborde la implantación de sistemas, cultura y mecanismos de rendición de cuentas en línea de los existentes en los países más avanzados de nuestro entorno", sostienen.
En esta vía apuntan también que se debe incentivar el uso de los datos abiertos para que estos sean un instrumento de generación de valor. Señalan que se debe reforzar la cultura de los datos haciendo más hincapié "en la calidad y el valor de los datos publicados que en la cantidad".
Por último, inciden en que se debe comprometer a los empleados públicos en la apertura de la Administración dándoles más competencias en gobierno abierto y dotándoles de medios y capacidades. El objetivo, indican, es incorporar a sus funciones la escucha a los ciudadanos, la receptividad y una mejor respuesta a sus propuestas así como el diseño y la implementación de procesos participativos".
Según el Esade, y en consonancia con las recomendaciones de la OCDE para mejorar la integridad en la Administración pública, se deben construir infraestructuras éticas. Esa implantación de una infraestructura de integridad pública coordinada entre todas las Administraciones "es la base de la estrategia para fortalecer al sector público en su integridad frente a las prácticas corruptas".