MADRID, 31 Jul. (EURoPA PRESS) -
El presidente de la Xunta de Galicia, Alberto Núñez Feijóo, ha afirmado este miércoles que el accidente ferroviario que se produjo hace una semana junto a Santiago de Compostela pudo deberse a un "despiste" o a que no se actuó "con la diligencia debida", pero ha recordado que "quien condena es la Justicia".
Tras señalar que la investigación aún se encuentra en "una fase muy inicial" Feijóo ha señalado que, teniendo en cuenta el testimonio del conductor, que reconoció su error, y los datos que revela la caja negra del tren, en la que se registran las incidencias y la conversación del maquinista con el centro de seguridad de Renfe, se puede considerar que "no se ha actuado con la diligencia debida" o que hubo un "despiste".
En una entrevista en Onda Cero recogida por Europa Press, el presidente gallego ha indicado que los hechos están siendo investigados tanto por el Ministerio de Fomento como por el Juzgado de Instrucción número 3 de Santiago.
Pero "quien condena es la Justicia tras las investigaciones y tras un juicio", no "los ciudadanos o los políticos desde nuestra perplejidad o nuestro dolor", ha subrayado Feijóo, que ha expresado de que "la mesura, la prudencia y el no precipitarse (...) arrojen luz" sobre lo ocurrido.
RESPUESTA "EXCEPCIONAL" AL ACCIDENTE
Por otro lado, ha elogiado la actuación de los vecinos de Angrois --donde descarriló el tren-- y de los efectivos de seguridad, emergencias y sanidad que trabajaron evacuando los cadáveres de las víctimas y atendiendo y trasladando a los heridos por que su respuesta ha sido "excepcional".
Así, ha precisado que en menos de 72 horas se hizo la autopsia y se identificó a las 79 personas fallecidas y que en tres horas se atendió a 180 heridos. "Aquella noche hubo servicios públicos que funcionaron con una extraordinaria calidad y con un protocolo que se cumplió", ha asegurado.
Esto demuestra que "tenemos un gran pueblo y un gran país", ha concluido el presidente de la Xunta, que también ha agradecido las muestras de apoyo de los presidentes de las distintas comunidades autónomas, del Gobierno central y de la Casa Real.
Por otro lado, ha criticado que algunos medios de comunicación extranjeros, cuando habían transcurrido "menos de 72 horas" desde el accidente y aún había cadáveres sin identificar y heridos en estado crítico, pusieran en cuestión la seguridad de la alta velocidad española. "Me parece una falta de respeto", ha manifestado.
Además, ha aclarado que en Galicia las infraestructuras de la alta velocidad se están construyendo y que actualmente hay una mezcla de vías de distinto tipo, por lo que los trenes deben adecuar su velocidad a cada tramo en función del tipo de vía.