Jorquera le acusa de "lacayo" del Gobierno central y Méndez Romeu critica que "se vendieron tópicos" en su viaje a Alemania
SANTIAGO DE COMPOSTELA, 26 Jun. (EUROPA PRESS) -
El presidente de la Xunta, Alberto Núñez Feijóo, ha reivindicado que su gobierno "no va a llevar a los gallegos contra las cuerdas" y, mientras que "hay territorios que quieren ser naciones y están intervenidos", Galicia se mantiene como una comunidad histórica con "mejores datos económicos y sociales que allí donde gobiernan los nacionalistas".
Con esta frase se ganó el aplauso de las bancadas populares durante la sesión de control al gobierno, que excepcionalmente se ha celebrado en jueves debido a que el martes ha sido festivo local en Santiago, y también respondió al portavoz parlamentario del BNG, Francisco Jorquera, quien previamente le había reprochado ser un "lacayo" del Gobierno central y un "mamporrero".
"Y por mucho que le pese, el Estado está en revisión, y con usted, Galicia está en riesgo de perder el vagón de cola, porque ustedes son la ruina de este país", ha espetado Jorquera, quien considera que limitarse a no pedir una merma de competencias supone "un resumen de su dimisión como presidente".
En la réplica, Feijóo, que en su intervención sacó a colación diversos datos para argumentar que la economía está mejor que en años pasados y los servicios sociales están "blindados", advirtió al diputado nacionalista de que los gallegos "votan libremente en las elecciones", que ganaron los populares.
Así las cosas, el presidente autonómico ha remarcado que entre el periodo 2009 y 2013, Galicia ha "vencido" la recesión y "ya no hay", después de crecer la economía por tercer trimestre consecutivo, y ha esgrimido que ha bajado la tasas de paro frente al año anterior, es "líder de exportación" en 2013 y fue la primera comunidad en incremento del IPI ese mismo año.
"Galicia hoy mantiene el autogobierno, las políticas sociales van destinadas a los que menos tienen y por eso pagamos la Risga", ha reivindicado Feijóo, quien también se refirió a los últimos datos de pobreza para destacar que Galicia "sigue tres puntos por debajo" de la media de España "pese a las dificultades demográficas".
"INSATISFACCIÓN" DE LOS GALLEGOS
Por ello, Jorquera ha concluido, de forma irónica" que "la insatisfacción de los gallegos es fruto de que se quejan de vicio", tras lo que ha asegurado que las políticas de los populares están llevando a la "ruina social y económica" a Galicia.
Además, el parlamentario nacionalista le preguntó si sigue afirmando que se "presentó contra la crisis" como afirmó cuando se proclamó candidato, a lo que Feijóo le replicó que afirmando que tiene "muy claro" que es así, frente al BNG, que se "presenta contra el PP", como se deduce al "leer el eslogan" con el que concurrieron a las urnas.
En su cara a cara con el nacionalista, el presidente autonómico también ha defendido que hoy hay 20.400 parados menos que hace un año y "menos" que cuando empezó la legislatura, Galicia "convergió" en renta para situarse en el 91,6% de la media española.
"TODOS MEJOR"
En la misma línea de defensa, el mandatario autonómico ha reivindicado los datos de los sectores estratégicos de la economía gallega, "todos mejor" que cuando los populares llegaron en 2009 al Gobierno relevando al bipartito, dijo en referencia a las TIC, el agroalimentario, el textil, el naval, la conserva y la automoción, entre otros.
El portavoz del Grupo Parlamentario Socialista, José Luis Méndez Romeu, centró su intervención en el sector turístico, aprovechando que Feijóo acaba de regresar de un viaje oficial de Alemania, al respecto del que también le echó en cara que no comparezca para explicar los resultados, algo que es habitual que lleve a cabo en esta legislatura el director xeral de Relacións Exteriores.
Sobre este reciente desplazamiento, en el que se reunió con el alcalde de Hamburgo, el socialdemócrata Olaf Scholz, y relativo a la vertiente turística, Méndez Romeu censuró que no acudiese de la mano del sector y no llevase a los turoperadores gallegos para promocionar Galicia.
"Los turoperadores gallegos no estuvieron, ustedes quisieron vender tópicos", ha censurado el dirigente socialista, quien criticó la presentación a bordo del Juan Sebastián Elcano, que se encontraba en la ciudad germana.
Al respecto, el presidente autonómico ha censurado que le parezca "ridículo" esta presentación y ha defendido que no acudiesen los turoperadores gallegos, porque lo que hizo Galicia fue recibir a medio centenar de representantes del sector alemanes. "De lo que se trata es de que los alemanes vengan, no de que vayamos nosotros", ha explicado.
Al margen de este aspecto en concreto, Méndez Romeu ha advertido de que la rentabilidad hotelera es de las más bajas en Santiago y 53 establecimientos están "en venta o traspaso" en toda Galicia.
Frente a esta visión, el mandatario gallego ha defendido que en Galicia creció el número de viajeros en un 4,9 por ciento en 2013, mientras que en España esa cifra fue del 1 por ciento, al tiempo que sigue aumentando el turismo internacional, un 11 por ciento el pasado año y un 13 por ciento (frente al 4,7% estatal) según los datos del primeros meses de 2014.
Además, Feijóo le replicó que, con el bipartito, el sector turístico "no se sentaba a negociar", aunque ha deducido que "de eso sabe poco" porque lo llevaba el otro ala del gobierno al que pertenecía. En este sentido, le reprochó que el gobierno de PSOE y BNG se gastaba 3 millones de euros al año en alquilar la sede del instituto Cervantes en Tokio.
NO SON "EMIGRANTES, SINO "MISIONEROS"
Tras los cara a cara, el diputado de AGE Antón Sánchez, y durante la defensa de una proposición no de ley, ha ironizado con las "oleadas de vascos y andaluces" que están llegando a Galicia por los buenos datos económicos, ante lo que advirtió de las posibilidades de que se formen "guetos".
Así, ha concluido, en ese mismo tono, que los gallegos no son "emigrantes", sino "misioneros" que van a explicar cómo se hacen las cosas para "conseguir solvencia". "No sé si había nieve, pero setas alucinógenas*¡esto es indignante", remató mientras Pilar Rojo, la presidenta de la Cámara, le llamó a la cuestión.