Felipe González: los ajustes han terminado con mi "distancia" con Zapatero

El ex presidente del Gobierno Felipe González y el presidente de la Diputación d
DIPUTACIÓN DE ALICANTE
Actualizado: jueves, 21 octubre 2010 18:24

Aboga por "una reforma laboral desde el punto de vista de la productividad por hora de trabajo".

ALICANTE, 21 Oct. (EUROPA PRESS) -

El ex presidente del Gobierno Felipe González ha afirmado que "hace tres o cuatro años", cuando la situación económica era "tranquila", "podía tener una distancia del actual presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero", pero en la actualidad, tras los ajustes realizados por el Gobierno, "no, de ninguna manera".

Así lo ha señalado durante la conferencia ofrecida este jueves sobre 'Retos y oportunidades de Europa en el nuevo orden mundial' en el Museo Arqueológico Provincial de Alicante (MARQ), en la que ha defendido la necesidad de que todos los países de la Unión Europea adopten ajustes y medidas de "emergencia" para adaptarse a la situación de "crisis sistemática y global".

En su opinión, es imprescindible acometer la citada reforma del sistema de pensiones, ante el problema demográfico que tendrá Europa en el 2050, y llevar a cabo también "una reforma laboral desde el punto de vista de la productividad por hora de trabajo".

A su parecer, "las fuerzas políticas tendrían que tener conciencia de esta situación, y cuando se le critica al Gobierno que recorte más y limite el gasto, como todas las fuerzas políticas tienen responsabilidades de gobierno (en las comunidades autónomas), se las tendrían que aplicar ellos mismos, porque si no, no tienen credibilidad".

En este punto, ha recordado además que "el mayor ajuste realizado en España es el del Gobierno central, y los otros tendrán que venir, por una u otra vía". Al respecto, ha defendido que las fuerzas políticas tienen que "hacer del diálogo por la nación de España y de la lealtad institucional algo consistente y serio".

"Sólo el que cree de verdad en un sistema público de pensiones va a plantear una reforma", ha asegurado, y se ha mostrado seguro de que "cuanto más se espere, más costosa y difícil" será acometerla.

En su análisis sobre la situación actual a la que se enfrenta Europa, ha explicado que los países europeos "no paran de perder competitividad, registran crecimientos pequeños y son poco productivos" frente a las economías emergentes, que ven esta crisis como una oportunidad.

"El mundo cambió en los últimos 20 años, y la Europa que conocemos es la exitosa de la posguerra", que ahora desea "mantener ese éxito", pero para ello "tienen que adaptarse" y "dar una respuesta de emergencia".

"Por primera vez tenemos un problema serio: tenemos una crisis global del capitalismo o economía de mercado mirándose en su espejo", porque "no existe alternativa a este sistema y tenemos que reformarlo", ha indicado.

"Europa es un gran milagro y un éxito extraordinario, pero podemos morirnos de éxito por no introducir los cambios estructurales necesarios", ha advertido.

PROBLEMA COMÚN EN LA UE

El problema es común a todos los países de la Unión Europea, excepto a Finlandia, pese a que, a su parecer, en España hay quien sufre "ataque de catetismo ex temporáneo", y piensa equivocadamente que lo que pasa en España, no ocurre en el resto de Europa.

En este sentido, se ha mostrado "indignado" ante quienes afirman que a Rodríguez Zapatero se le han impuesto los ajustes realizados, dado que otros gobiernos como el británico, el francés o el alemán, los están teniendo que afrontar igualmente.

"Ojalá no fracase Sarkozy, me preocupa mucho que el Gobierno de Sarkozy no pueda mantener una mini reforma de pensiones", ha comentado, al tiempo que ha defendido la "respuesta de emergencia" que el presidente galo ha dado ante las protestas ciudadanos.

"Todo el mundo, y todos los gobiernos del color que sean, pagarán la crisis, por tanto el debate es que no hagan los gobiernos de turno ahora, lo tendrán que hacer los que vengan en condiciones muchos más difíciles", ha adelantado.

Por ello, ha asegurado que "sería mucho mejor" que los países de la Unión Europea aceptaran la "situación de emergencia" y enfrentaran "el desafío en serio y entre todos".

"Tienen que modular el estado de bienestar para librarlo de lo que llaman riesgos morales del estado del bienestar, que es el uso y el abuso del estado de bienestar", ha defendido.

Además, ha subrayado que el método de cooperación abierto en el año 2000 ha fracasado porque "cada uno ha hecho lo que le ha dado la gana", y ahora Europa carece de una estrategia común para afrontar problemas como "la crisis energético", y una crisis agroalimentaria que se ha mostrado convencido de que llegará a la UE en un futuro.

La conferencia, organizada por la nueva Fundación Cultura Pública de la Comunitat Valenciana, ha contado con la asistencia de más de doscientas personalidades de la vida política, económica, social y cultural de la provincia de Alicante.