Fernández Díaz lamenta que el Congreso le investigue pero promete declarar si le citan

MADRID 27 Sep. (EUROPA PRESS) -

El ministro del Interior en funciones, Jorge Fernández Díaz, ha lamentado este martes que el Congreso, a instancias del PSOE, haya aprobado abrir una comisión de investigación sobre las escuchas de las conversaciones mantenidas con el exdirector de la Oficina Antifraude catalana Daniel de Alfonso, y ha avanzado que acudirá "con mucho gusto" a la misma si le citan para explicar lo que le pregunten y añadir "alguna cosa más".

En los pasillos del Congreso, el ministro ha denunciado "la absoluta irresponsabilidad" del PSOE por hacer "el trabajo sucio" a los independentistas catalanes al plantear una comisión de investigación sobre esta cuestión lo que, a su juicio, evidencia "cuáles son las prioridades" del partido.

Tras recordar que la última comisión de investigación que se abrió fue en 2004 sobre los atentados del 11M, el ministro ha denunciado que los socialistas aseguren que en España hay "policía política", como si fuera Corea del Norte, y que critiquen que las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado y los jueces se dedican a "tapar" la corrupción.

"Es una ofensa que atenta contra el sentido común y contra la verdad", ha manifestado Fernández Díaz, máxime cuando los tribunales ya se han dicho que no hay indicios de delito en el contenido material de las grabaciones filtradas.

Y LO HARÁ "CON MUCHO GUSTO"

El ministro no entiende que algunos se "llenen la boca" de hablar de regeneración democrática y no critiquen "a quien cometió el hecho execrable de filtrar en plena campaña unas grabaciones ilegales que se produjeron dos años antes".

Con todo, Fernández Díaz ha querido dejar claro que si la comisión de investigación acordada este martes por el Congreso le cita para dar cuenta de esas escuchas, comparecerá "con mucho gusto". "¿Faltaría más!, ha dicho, dado que está obligado.

De hecho, ha confesado haberse visto el debate de la citada iniciativa desde su despacho en el Congreso y de haberse reprimido de no entrar en el hemiciclo para contestar. En todo caso, cuando ha llegado al Salón de Plenos para votar los distintos puntos del orden del día, ha sido recibido con aplausos burlescos por parte de la Cámara, singularmente de Unidos Podemos.