La CUP es un partido "antisistema que ejerce la violencia"
BARCELONA, 25 May. (EUROPA PRESS) -
El candidato del PP por Barcelona y ministro del Interior en funciones, Jorge Fernández Díaz, ha asegurado este miércoles que incidentes como los ocurridos en Gràcia tras el desalojo del conocido como 'Banc Expropiat' están vinculados al hecho de "gobernar apoyado en extremistas", en alusión a la CUP.
"Que un gobierno como el de la Generalitat, con competencias tan importantes, dependa de un partido como la CUP es insostenible", ha destacado en rueda de prensa en la sede barcelonesa del PP junto al portavoz del partido en el Congreso, Rafael Hernando.
Ha dudado de que la CUP pueda garantizar la gobernabilidad y al mismo tiempo ser un partido "antisistema que ejerce la violencia como se ha visto" en Gràcia.
También ha criticado que el Ayuntamiento de Barcelona "esté apoyando a los que protagonizan estas acciones en vez de preservar el bien común", algo insólito y que debe hacer reflexionar a los ciudadanos sobre la necesidad de que haya gobiernos serios y responsables.
"De un partido como la CUP no puede depender la gobernabilidad del Ayuntamiento", ha respondido al ser preguntado por la presencia del concejal 'cupaire' Josep Garganté en las protestas contra el desalojo.
También ha criticado que los socialistas hayan apostado por sumarse al gobierno municipal de BComú: "El PSOE se incorpora así a un proyecto radical y extremista".
"Gobernar apoyado en extremistas y en radicales lleva a situaciones como" las que se vivieron en Gràcia, algo que no conviene ni a los barceloneses ni al conjunto de catalanes, ha añadido.
Esta lógica "también vale para el Gobierno de España", ha asegurado, y se ha cuestionado qué ocurriría si la gobernabilidad y la estabilidad del Ejecutivo central dependiera de partidos radicales y extremistas como Podemos.
NO ES CASUAL
Fernández Díaz cree que no es casual que los altercados en Gràcia coincidieran con la presentación en el Parlament del proyecto de Presupuestos para 2016, a la que la CUP no acudió en señal de rechazo a las cargas policiales.
"Voy a estar siempre del lado de la policía, en este caso de los Mossos", cuya misión es garantizar la seguridad ciudadana, el cumplimiento de la ley y evitar que hechos tan graves como los ocurridos en Gràcia queden impunes.
Ha evitado valorar el uso de balas de foam en las cargas policiales y ha apelado al "respeto por el ámbito competencial de la Generalitat", de quien dependen los Mossos.