MADRID 15 Nov. (EUROPA PRESS) -
El director general de la Guardia Civil, Arsenio Fernández de Mesa, ha destacado durante la conferencia 'Reflexiones sobre la Guardia Civil' que ha impartido este martes que el terrorismo y la lucha contra el crimen organizado son, a día de hoy, "los principales retos y amenazas para la seguridad" en España.
Durante el acto, que ha tenido lugar en el XXXVI Curso de Defensa Nacional celebrado en la sede del CESEDEN en Madrid, Fernández de Mesa ha explicado el marco legal sobre el que se conforma la seguridad pública en España, cuál es el papel de la Guardia Civil, sus misiones tanto dentro como fuera del país, así como los avances que se han producido en los últimos años y los principales retos y amenazas para la seguridad.
En su discurso, el director general de la Guardia Civil ha subrayado que la ratio policial en España es de 5,1 agentes por cada mil habitantes, la segunda más alta de los países de la Unión Europea tras Chipre.
Respecto a la Guardia Civil, ha destacado que es responsable de la seguridad ciudadana del 84,5 por ciento del territorio nacional, ya que abarca un total de 6.755 de los 8.122 municipios existentes en España (el 72% de menos de 2.000 habitantes y el 48% con menos de 500 habitantes). Para ello, cuenta con unos 84.000 efectivos desplegados tanto dentro como fuera de España.
Sobre las principales amenazas que afectan a la seguridad, Fernández de Mesa ha destacado el terrorismo y la lucha contra el crimen organizado. Respecto al primer aspecto, ha recordado operaciones contra ETA como la detención de Mikel Irastorza, considerado jefe de la banda, el pasado 5 de noviembre o, con respecto al terrorismo yihadista, el arresto de 657 personas en España y 63 en el exterior desde los atentados del 11 de marzo de 2004.
En cuanto al segundo aspecto, ha subrayado que en el último año la Guardia Civil realizó más de 5.000 investigaciones y detenciones de personas por crimen organizado; otras 4.500 por delitos contra el patrimonio; más de 3.000 fueron los detenidos por tráfico de drogas en las que se intervinieron más de 260 toneladas de cannábicos y 6 toneladas de cocaína.
Además, casi 2.500 personas fueron detenidas por blanqueo de capitales, bloqueándose valores por encima de los 50 millones de euros; por fraude a la seguridad social se detuvo a 831 personas, descubriendo en estas detenciones más de 12 millones de euros, y hubo casi 350 detenidos en 200 operaciones por ciberdelincuencia.