Fernández Teixidó abandona 23 años de militancia de CDC ante el independentismo del PDC

El Conseller Boi Ruiz Dialoga Con El Diputado Antoni Fernández Teixidó
EUROPA PRESS

Cree que el PDC nace como representante de la "izquierda moderada independentista"

BARCELONA, 13 Jul. (EUROPA PRESS) -

El exconseller y representante del ala más liberal de la antigua CDC, Antoni Fernández Teixidó, ha decidido poner fin a 23 años de militancia del partido al no sentirse representado por la apuesta independentista y republicana del Partit Demòcrata Català (PDC) que, a su juicio, no se diferencia de la orientación de ERC.

La decisión de Teixidó, que ha expuesto él mismo en un articulo este miércoles en 'La Vanguardia' recogido por Europa Press, llega meses después de que ya renunciara a los cargos en CDC por "discrepancia política" al oponerse a la declaración de inicio del proceso soberanista y dos días después de la refundación del partido en el PDC.

Para Fernández Teixidó, objetivos del PDC como la independencia, la República, la declaración unilateral con matices y un nuevo Estado catalán no le han generado sorpresa alguna, aunque ha añadido que esta "no era la pretensión" del expresidente de la Generalitat Artur Mas.

Según él, Mas quería fórmulas "más ambiguas para crear un partido nacional de amplio espectro", destacando que la apuesta por un soberanismo, diferenciado del independentismo, era con la transversalidad política la aspiración de los dirigentes que han enterrado CDC.

"Siempre he pensado que no lo conseguirían", ha apuntado Fernández Teixidó, pese a considerar que, desde el congreso de Reus en 2012, gran parte de dirigentes convergentes han trabajado para este desenlace.

SIN AUTOCRÍTICA

Sin embargo, ha constatado que la estrategia de la extinta CDC le ha llevado a tener de 62 a 30 diputados, le ha costado más de 600.000 votos sin autocrítica alguna y a acabar con el partido fundado hacia más de 40 años, además de lamentar que se haya perdido "una parte sustantiva de dirigentes probados" del partido.

Aunque ha admitido que los casos Palau y del expresidente Jordi Pujol han afectado negativamente al partido, ha asegurado que se ha preparado con cuidado una generación de cuadros para defender "un independentismo que no tiene mucho que ver con la tradición de Convergència", pese a añadir que la clase política española ha ayudado a madurar el rechazo de la sociedad catalana.

A su juicio, el proceso soberanista ha empujado el centrismo catalán hacia la izquierda y, en el caso de Convergència, "lo ha hecho irremisiblemente", posibilitando, sin desearlo, la creciente hegemonía de ERC.

El exconseller ha advertido de que los republicanos lo han aprovechado, tras asegurar que no encuentra diferencias de grado entre ERC y el PDC, al margen de su aspiración por ocupar un espacio central de la política catalana.

Pese a todo, ha reprochado que la apuesta del PDC no es la del carril central de la política catalana porque nace "como representante de la izquierda moderada independentista", lo que le llevará a una confluencia política y organizativa con ERC que crecerá.

"La disputa será por el liderazgo y el poder. Dos equipos de dirigentes con orígenes diferentes batallando ásperamente por la hegemonía del mismo espacio electoral", ha augurado.

ORFANDAD POLÍTICA

Para Fernández TeIxidó, una parte importante del electorado catalán se ve abocado a la orfandad política porque, en su opinión, hay muchos de los que son de centro "que no se sienten independentistas, que no se identifican con las izquierdas y no creen que el republicanismo deba estar en el centro de sus preocupaciones".

Por ello, ha argumentado que debe acabar con 23 años de militancia catalanista en CDC y, pese a las discrepancias de estos últimos tiempos, ha expresado su respecto y agradecimiento por la etapa vivida.

"Es el momento, con la cabeza fría, el espíritu inquieto y la voluntad de Servicio, de hacer nuevas coses para el país. Es necesario un impulso político diferente y combativo para trabajar por una Cataluña fuerte con 'seny", ha concluido.