MADRID 29 Ago. (EUROPA PRESS) -
La Fiscalía de la Audiencia Nacional cree que los actos del "Ospa Eguna" se alinean con el "objetivo táctico" de ETA de expulsar a la Guardia Civil del País Vasco y Navarra y pide por ello que se prohíba la celebración de los actos previstos este sábado en la localidad de Alsasua, pues sólo buscan "generar un ambiente de presión y hostilidad" contra el Instituto Armado y humillan a las víctimas de la banda terrorista.
Así se lo ha trasladado el Ministerio Público este jueves al Juzgado Central de Instrucción número 2 de la Audiencia Nacional, en funciones de guardia, tras la denuncia recibida de la asociación de guardias civiles JUCIL que reclamaba la prohibición de esta conmemoración que en Castellano se traduce como "Día del Adiós" y que desde el año 2010, reivindica la retirada de las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado en las comunidades de Navarra y País Vasco.
"Dicha expulsión es una reivindicación que históricamente ha llevado a cabo la organización terrorista ETA y que en la actualidad se sigue llevando a cabo por cierto sector de la izquierda abertzale", recuerda el Ministerio Público.
En el escrito, difundido parcialmente este jueves, la Fiscalía argumenta que "el acto trata de conseguir el objetivo táctico de la banda terrorista ETA" y lo engloba en el movimiento 'Alde Hemendik', concebido en origen "como una dinámica global que abarcaba los territorios de la comunidad autónoma del País Vasco y la comunidad Foral de Navarra aunque en la actualidad se ha deslocalizado, recibiendo nombres diferentes en función de los grupos locales que los organizan".
"En lo que se refiere al aspecto terrorista de los hechos, estos ataques públicos al Cuerpo de la Guardia Civil como uno de los estamentos más duramente castigados por la acción criminal de la organización terrorista ETA conlleva además un envilecimiento y un humillación contra las víctimas de dicha organización", razona la Fiscalía, en relación tanto a los propios agentes y sus familias y demás afectados como a los daños materiales sufridos a consecuencia de los numerosos atentados.
En su opinión, la finalidad del acto "no es otra que generar un ambiente de presión y hostilidad sobre los miembros de la Guardia Civil, generando un clima de terror entre sus componentes destinados en las Comunidades Autónomas de Navarra y el País Vasco, hasta conseguir su aislamiento social y su expulsión" ya que los organizadores consideran que se trata de "fuerzas de ocupación del Estado español".
LOS AGENTES, "VULNERABLES" A UN ATAQUE INDIVIDUAL
En este sentido, incide en que si bien la Guardia Civil como Cuerpo dispone de "mecanismos de defensa fuertes", no es el caso del agente como sujeto, que es "vulnerable al ataque individual en el desarrollo de su actividad privada en localidades como Alsasua que han sido feudos del ámbito más radical de la izquierda abertzale durante años".
"El señalar y hostigar a una familia en concreto, o a guardias civiles que, por razones de su destino, desarrolla su vida cotidiana en esa población navarra, incita al resto de la población a aislarlos socialmente para no resultar estigmatizado ni sufrir el mismo aislamiento que los guardias civiles", añade la Fiscalía de la Audiencia Nacional.
Solicita así que se prohíba el acto "por ser inicialmente constitutivo de delito, cuyo previo conocimiento exige impedir a tiempo su iniciación y desarrollo" y que se comunique al Departamento de Interior del Gobierno de Navarra la necesidad de adoptar las medidas necesarias para impedir la celebración, prevenir la comisión de delitos e identificar y poner a disposición judicial a las personas que, vulnerando tal prohibición, realicen actuaciones que revistan "siquiera indiciariamente" caracteres de delito.