Archivo - El comisario jubilado José Manuel Villarejo (d) a su llegada a una sesión del juicio en la Audiencia Provincial de Madrid.
Archivo - El comisario jubilado José Manuel Villarejo (d) a su llegada a una sesión del juicio en la Audiencia Provincial de Madrid. - Isabel Infantes - Europa Press - Archivo
Actualizado: jueves, 9 febrero 2023 13:15

Su mujer niega también haber ordenado hacer la grabación y el periodista acusado dice que no conocía al comisario

MADRID, 22 Dic. (EUROPA PRESS) -

La Fiscalía ha mantenido este jueves su petición de condenar al comisario jubilado José Manuel Villarejo a 4 años de cárcel al considerarlo culpable de ordenar grabar de manera "ilegal" y difundir una reunión de 2014 entre la Policía Nacional y el Centro Nacional de Inteligencia (CNI), porque su objetivo era "afectar, anular o incordiar" la investigación abierta por el cuerpo policial sobre Francisco Nicolás Gómez Iglesias, conocido como 'El Pequeño Nicolás'.

En su informe final, el fiscal ha ratificado el relato de hechos que presentó al inicio del juicio que se ha seguido en la Audiencia Provincial de Madrid y que ha quedado hoy visto para sentencia. Y ha destacado que "parece lógico" que quien "organiza" el "plan" de grabar "fue alguien con interés en evitar la investigación".

La reunión tuvo lugar el 20 de octubre de 2014, cuando el entonces jefe de la Unidad de Asuntos Internos Marcelino Martín Blas informó a varios agentes del CNI que había una investigación en curso sobre 'El Pequeño Nicolás', a quien tenían bajo sospecha por hacerse pasar --ante varios empresarios-- como enlace entre la Vicepresidencia del Gobierno y la Casa Real, así como por agente de Inteligencia.

"Y parece lógico que fuera un policía o alguien con información directamente de funcionarios de la Policía que estaban al tanto de la reunión de Asuntos Internos", ha remachado el Ministerio Público.

Para el fiscal, la "finalidad" del plan orquestado por Villarejo era "afectar, anular o incordiar" la investigación sobre 'El Pequeño Nicolás' "y conseguir al final, de alguna forma, que se anule".

Desde el principio del juicio, el Ministerio Fiscal ha sostenido que el comisario se enteró de que se iba a realizar la reunión y "planeó grabar la conversación" con el propósito de difundirla posteriormente no solo en 'Información Sensible', sino también en otros medios, para "lograr así obstaculizar, entorpecer o bloquear la investigación en curso" que la Policía tenía sobre Gómez Iglesias.

Ha señalado que se ha demostrado que Villarejo era el propietario del medio de comunicación "a través de varias sociedades" y ha restado importancia a que no se haya podido saber qué aplicación informática se utilizó para grabar la reunión. "Algún artificio técnico tuvo que usarse para conseguir la grabación", ha esgrimido.

Dicho esto, ha explicado que se puede borrar todo vestigio de lo que contenía el móvil que recibió la llamada, que fue el de Martín Blas, porque "un buen atacante no deja rastro de su ataque".

El Ministerio Público sostiene que un periodista de 'Información Sensible' llamó desde su móvil al jefe de Asuntos Internos y "activó algún tipo de aplicación informática o 'software' que permitió captar el sonido ambiente sin que pudiera ser advertido por Martín Blas".

Según el fiscal, "no es que uno de los participantes de la reunión haya difundido o grabado un secreto, sino que ha sido alguien ajeno y, por lo tanto, el secreto existe", ha resumido, para añadir que se afectó la "intimidad" de 'El Pequeño Nicolás', ya que el encuentro entre Martín Blas y el CNI se produjo en un "ámbito oficial" en el que lo hablado no debía trascender sin un consentimiento expreso.

"MI MARIDO ESTABA EN SU MUNDO"

Además, la Fiscalía ha elevado a definitivas también sus conclusiones provisionales respecto a la mujer de Villarejo, Gemma Alcalá, y el periodista Carlos Mier, a los que considera "colaboradores en la realización y difusión de una grabación ilegal".

El fiscal reclama para el comisario 4 años de prisión por el presunto delito de descubrimiento y revelación de secretos, mientras que solicita 3 años para Alcalá y Mier como cooperadores necesarios. La Abogacía del Estado, que solicitaba las mismas penas, también las ha corroborado en esta sesión y la Plataforma x la Honestidad, que pedía un castigo mayor, se ha sumado a lo pedido por la Fiscalía. Por su parte, Podemos demanda 5 años para Villarejo y 4 para el resto.

Como ya hiciera ayer el comisario, la mujer de Villarejo ha negado que ordenara al periodista grabar aquella reunión y ha expresado que el hecho de estar en el banquillo de los acusados junto a Mier se debe a "daños colaterales de la persecución" contra su marido.

Sobre si recibió alguna orden de su marido para hacer la grabación o le aconsejó alguna aplicación informática para ello, Alcalá ha respondido que es "absurdo": "Para nada, mi marido estaba a sus cosas, en su mundo, y yo no sabía de esto ni de otras muchas cosas".

Y preguntada sobre qué hizo el día de la grabación, ha asegurado que estuvo con su madre en el hospital porque la habían operado y ese día, el 20, la dieron de alta, fue a por ella y se la llevó a casa.

Alcalá ha desmentido que ella fuera la propietaria del medio de comunicación, ha limitado su trabajo a "temas administrativos" y ha relatado que en aquella época estaba centrada en estudiar un curso de gestión de páginas web, ya que quería montar un proyecto propio y la de 'Información Sensible" iba mal y se quedaba "pillada, colgada".

Por su parte, Mier ha declarado que "jamás" grabó ni difundió nada y ha explicado que esos días llamó varias veces a Martín Blas tras haber publicado en exclusiva el arresto de 'El Pequeño Nicolás' y porque en el auto de detención aparecía reflejado Asuntos Internos.

Ha negado que conociera a Villarejo ni que Alcalá era su mujer, precisando que supo del policía cuando tiempo más tarde, y ya habiendo dejado 'Información Sensible', los medios de comunicación empezaron a publicar noticias acerca de la "guerra de comisarios".

SER ABSUELTOS POR FALTA DE PRUEBAS

La defensa de Villarejo ha reclamado su absolución por falta de pruebas, ha calificado de "elefantiásica" la investigación, ha criticado que se hayan intervenido comunicaciones de varios periodistas y ha indicado que quien grabó pudo ser otra persona. De igual forma, las de Alcalá y Mier han pedido que sean absueltos.

Villarejo negó el miércoles que hubiera ordenado grabar y haber difundido la reunión del CNI y Asuntos Internos, ni que supiera que se iba a celebrar. "A mí qué me importaba esa historieta", señaló, al tiempo que se mofó del sistema con el que se hizo la grabación.

En su declaración, manifestó que es "absurda" la tesis de que en 2014 le pidiera a Mier que grabara la conversación. "Pero, ¿por qué no la hice yo? ¿Para qué necesito involucrar a un tercero?", abundó.

El comisario incidió en que tenía "bastantes teléfonos operativos y teléfonos virtuales" con un "programa informático" con el que se "llamaba y el teléfono desaparecía". "Pero yo no llamé", zanjó.

"Menudo programa de risa que deja un rastro de la llamada que se ha hecho. Es un poco de chiste", afirmó, insistiendo en que ni grabó la reunión ni estaba interesado en conocer lo que en la misma pasara.

En su última palabra, Villarejo ha agradecido al tribunal que le haya devuelto la confianza en la Justicia por su "corrección y respeto", y ha trasladado que no se arrepiente de haber "abandonado" su posición dentro de la Policía para "criticar" desde fuera los "abusos" que "en nombre del Estado" hacían personas con mucho poder.

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