MADRID, 1 Jun. (EUROPA PRESS) -
Francisco Jerez aprovecha su situación privilegiada junto a la fundadora de UPyD, Rosa Díez, desde el nacimiento del partido para desgranar en un libro la trayectoria de la formación 'magenta' y detalles hasta ahora desconocidos sobre los enfrentamientos internos y la crisis que acabó con el partido.
Jerez fue jefe de gabinete de Rosa Díez durante más de seis años y de UPyD en el Congreso de los Diputados durante ocho, lo que le permitió vivir en primera persona los éxitos y después las caídas vividas por el partido desde su fundación en el año 2008, que ahora detalla en el libro 'Engaños y desengaños de un partido emergente', que se presenta este jueves en Madrid.
"¿Cómo se hizo realidad un sueño para convertirse en pesadilla a los ocho años?", se pregunta Jerez, quien conoció a Rosa Díez en Bruselas cuando aún era eurodiputada del PSOE. "Tenía grandes virtudes para el liderazgo, creía que era una persona especial para aprender. Con el paso del tiempo desgranaría también los defectos que, como todos, tenía", revela sobre la que fuera principal motor de la formación.
A su juicio, el liderazgo de Rosa Díez era "un factor positivo y una táctica idónea" para el nacimiento de UPyD, pero ligar la marca a una sola persona se acabó convirtiendo en "una amenaza para la propia supervivencia de la formación". "Con el tiempo, se necesitaban más cabezas visibles para que trascendieran las siglas más allá de Rosa", asume.
ÉXITOS Y FRACASOS
El libro relata su primera campaña electoral con muy pocos medios, las primeras elecciones y el ascenso de la formación. Todo hasta que empezó su caída en las elecciones autonómicas andaluzas de marzo del pasado año, a partir de cuando "fueron todo desgracias".
"Estábamos en el ojo del huracán mediático por nuestro primer fracaso electoral, pero sobre todo por la desatada crisis interna. Habíamos dejado de ser caballo ganador en beneficio de Ciudadanos y muchos de nuestros afiliados eran conscientes de que se les escapaba una oportunidad en las municipales y autonómicas que se avecinaban", analiza.
A su juicio, los "pocos" que militaban en UPyD tuvieron "el error" de no mantenerse unidos en las crisis como consecuencia de "ambiciones desbocadas, traiciones, sentimientos de odio o sed de venganza". "Cuando la situación se convirtió en irreversible, no supimos reaccionar y nos empecinamos en el enfrentamiento", analiza.
Después de esto llegó el adiós de Rosa Díez y el enfrentamiento entre Andrés Herzog e Irene Lozano por el liderazgo. "En mi opinión, ganase quien ganase, perdía UPyD; cualquier tipo de transición quedaba rota por las consecuencias del enfrentamiento", reconoce asumiendo que, con la marcha de Rosa Díez y el enfrentamiento, UPyD desaparecía "del mapa del todo".
EL ORGULLO Y LA VANIDAD NOS TERMINÓ DE MATAR
"Habíamos llegado tarde para diagnosticar nuestra enfermedad. Cuando quisimos ponernos a enmendar, hubo reticencias, y las elecciones nos colocaron en la realidad de la situación. Ahora, nos habíamos matado entre nosotros, y Rosa se iba de la primera línea. Habíamos perdido definitivamente el rumbo para intentar liderar España", asume con dureza.
Después de eso llegaron las pasadas elecciones generales del 20 de diciembre con Herzog como candidato, cuando UPyD quedó fuera de las Cortes Generales. Jerez relata cómo se impuso la palabra "orgullo" como "luto" durante los últimos meses. "Quizás no era paradójico: el orgullo y la vanidad nos terminó de matar", concluye.