MADRID, 4 Jun. (EUROPA PRESS) -
La XI Asamblea de IU debate este fin de semana el proyecto que marcará el rumbo de la organización durante los próximos cuatro años, que el equipo de su nuevo líder, Alberto Garzón, quiere que esté volcada en la movilización social y los réditos electorales sean "la última expresión de una toma de conciencia que se genera en la práctica política".
"La confluencia no es sólo de carácter electoral", reza el 'Llamamiento' propuesto por Garzón para ser aprobado por los delegados que participan en la Asamblea. Este documento defiende la tesis de que es necesario un nuevo sistema construido a través de la movilización en colaboración con otras fuerzas sociales y políticas.
La nueva IU hace un llamamiento a construir un nuevo sistema político y económico y poner en marcha un proceso constituyente. "No queremos reformas de chapa y pintura", avisa dejando claro que no aceptará pactos que aparenten proponer cambios pero que en realidad supongan "más de lo mismo". "No queremos una restauración del sistema, sino un nuevo sistema", aclara.
Para ello, asume que es necesario sumar "a mucha más gente" y llama a volcar su actividad en los conflictos sociales "que emergen en todas partes y que expresan las contradicciones de este sistema, pero también sus soluciones". "Vamos a ser una organización que construya tejidos sociales, que sea en sí misma una nueva forma de entender la vida política y social, una organización de solidaridad y redes de colaboración y compromiso", estipula insistiendo en que esto sólo será posible si se suman "fuerzas y energías".
Esta idea de partido ha sido presentada por el líder de IU en Andalucía, Antonio Maíllo, quien ha sido fuertemente ovacionado por el auditorio. Maíllo ha propuesto la alegría "como instrumento de cambio" y ha pedido a sus compañeros "integridad" para "soportar las presiones del poder político y económico". "Cuanto más nos ataquen, más cerca de la cima estamos", ha celebrado.
Frente a él han defendido su proyecto los representantes de las dos corrientes críticas que enfrentaron su candidatura con la de Garzón. La eurodiputada Paloma López ha sostenido que IU es una organización a la que aún queda mucho "camino por recorrer", mientras que Tasio Oliver, de Izquierda Abierta, ha dicho que, pese a que siguen "vivos", la izquierda alternativa y social "ha perdido una oportunidad".