MADRID 12, (EUROPA PRESS)
El delegado del Consell para la UE y Relaciones Externas de la Presidencia de la Generalitat Valenciana, Joan Calabuig Rull, ha trasladado este viernes su compromiso para continuar mediando con el Frente Polisario para liberar a las jóvenes saharauis que permanecen retenidas en los campamentos de refugiados de Tinduf (Argelia) por sus familias biológicas.
Calabuig ha mantenido este viernes una reunión en San Miguel de Salinas (Alicante) con Bienvenida Campillo, madre de acogida de Koria Badbad Hafed, que fue secuestrada hace 7 años, para informarse personalmente sobre los pormenores del caso de su hija de acogida y de otros que se han hecho públicos sobre el resto de jóvenes retenidas.
Durante el encuentro, de más de una hora de duración, Calabuig ha transmitido a esta familia la solidaridad y el compromiso del Gobierno valenciano de continuar los esfuerzos y su mediación ante el Frente Polisario en favor de la liberación y el pleno respeto a los Derechos Humanos tanto de la propia Koria como de las otras jóvenes en la misma situación (Maloma Morales de Matos, Hyeiba El Couri Mumu, Nadjiba Mohamed Belkacem y Darya Embarek Selma).
Por su parte, Bienvenida Campillo ha insistido ante el responsable en el Consell en que Koria se encontraba bajo la Tutela Legal de la Consellería de Bienestar Social de la Generalitat cuando, en diciembre de 2010, fue retenida.
Según su madre de acogida, tras 10 años y medio sin poder hacerlo por una afección cardíaca, Koria viajó a Argelia a tres meses de cumplir la mayoría de edad para visitar a sus padres, nómadas beduinos residentes en los territorios del Sahara Occidental bajo control del Frente Polisario.
Bienvenida afirma que, tras una semana de visita a su familia biológica acompañada por su madre y hermano españoles, el 4 de enero de 2011, a pocas horas de salir hacia el aeropuerto para regresar a España, la madre biológica de Koria la envió a la tienda y, en el camino, su padre y varias tías paternas la introdujeron por la fuerza en el coche y desapareció sin dejar rastro. Al día siguiente, ya en España, su familia de acogida escuchó un mensaje de voz de Koria suplicando su ayuda.
Según Bienvenida, desde su secuestro, Koria continúa privada de libertad confinada en la región de Mijek, en el Sáhara occidental, muy alejada de los campamentos.
Sus padres de acogida no se han podido volver a comunicar con la joven y, pese a haber viajado a los campamentos para instar al Frente Polisario a que le entreguen su medicación y les permitan verla, todos los intentos de lograr algún tipo de actuación de las autoridades saharauis han sido infructuosos.