Denuncian que el diálogo entre el Gobierno y la oposición ha sido una farsa para que el régimen gane tiempo
MADRID, 16 Feb. (EUROPA PRESS) -
Los ex presidentes del Gobierno Felipe González y José María Aznar han pedido que la Organización de Estados Americanos (OEA) tome medidas en el caso de Venezuela por el deterioro de la democracia en ese país, donde hay "presos políticos" y no se respeta la separación de poderes, con un Ejecutivo que acapara el control del Estado.
En un acto conjunto ante la prensa en el despacho de abogados Cremades y Calvo Sotelo, y sin admitir preguntas, González y Aznar han suscrito el diagnóstico de la situación que hace el secretario general de la OEA, Luis Almagro, que se dispone a actualizar su informe crítico con los retrocesos en Venezuela y que podría instar de nuevo a los miembros de la OEA a activar la Carta Democrática en el caso de Venezuela, un proceso que podría terminar con la suspensión del país en ese organismo.
González y Aznar apoyan dar este paso porque, en su opinión, el diálogo entre el Gobierno de Nicolás Maduro y la oposición alentado por Unasur y que ha apoyado el Vaticano no ha sido más que una "farsa" para que el régimen gane tiempo.
"Los gobiernos no pueden seguir mirando para otro lado", ha dicho Aznar, mientras que González ha opinado que la activación de la Carta Democrática es el "único frente abierto" para demostrar que Venezuela no cumple los requisitos mínimos democráticos para participar en la OEA.
González ha denunciado que son "falsas" todas las pruebas contra López, al que el régimen acusa de instigar las revueltas estudiantiles de 2014 que derivaron en enfrentamientos violentos con las fuerzas de seguridad.
Y ha advertido de la concentración total del poder en torno al Ejecutivo de Maduro, cuya arbitrariedad ha "anulado" al resto de las instituciones. Como ejemplo, ha recordado que el fiscal de la causa contra López se encuentra asilado en Estados Unidos después de que se negara a colaborar en la fabricación de pruebas contra el opositor.
Tanto González como Aznar han aprovechado para pedir la liberación de todos los presos políticos, que se acercan al centenar.
ELOGIO A TRUMP
Aznar ha elogiado la posición que ha fijado sobre Venezuela el presidente de Estados Unidos, Donald Trump, que ha recibido a la esposa de López, Lilian Lintori, este miércoles en Washington. Ese gesto, y las sanciones económicas del Departamento del Tesoro contra el vicepresidente de Venezuela, Tareck El Aissami, son "pasos en el buen sentido".
En el acto también ha tomado la palabra el padre de Leopoldo López, que reside en España. Leopoldo López padre ha arremetido contra el invento del diálogo por parte del régimen, que contó "con la anuencia de líderes internacionales que se prestaron a ese juego".
El expresidente del Gobierno José Luis Rodríguez Zapatero ha sido uno de los mediadores en ese proceso de diálogo, que ha desembocado en la liberación de algún preso, aunque se ha encarcelado a otros, como ha recordado González.
En declaraciones a la prensa al abandonar el despacho, González ha contestado a las críticas vertidas por el líder de Podemos, Pablo Iglesias, sobre la participación de los expresidentes en el acto, al considerar que echa más leña al fuego.
González ha subrayado que hay que preguntarse quién no está en el acto y por qué y ha invitado a Iglesias a que "dé la cara" pidiendo que no haya presos políticos en Venezuela.