Cree que Rajoy tiene "mano izquierda" para hacer que Artur Mas se encargue a partir de ahora "de lo que debe: la economía"
MADRID, 10 Nov. (EUROPA PRESS) -
El vicesecretario de Estudios y Programas y portavoz en el Parlamento Europeo del PP, Esteban González Pons, ha ironizado que espera que este lunes sea un día ajetreado para el cartero de la Generalitat de Cataluña, que deberá recoger la carta que Artur Mas quiere enviar a Mariano Rajoy tras el 9N, pero también entregar al presidente catalán una de la Fiscalía porque "saltarse la ley" no es "gratis". "Espero que el fiscal le llame. Me gustaría", ha dicho.
"Va a ser un día de cartas en el Palau", ha añadido González Pons en declaraciones en TVE, recogidas por Europa Press. El dirigente 'popular' ha expuesto que la consulta celebrada este domingo en Cataluña ha sido un "simulacro" y el resultado ofrece un dato conocido "hace tiempo": que un tercio de los votantes catalanes son independentistas y son los que acudieron ayer a las urnas. "La situación sigue siendo la misma del día anterior", ha agregado.
En cuanto a la responsabilidad de Artur Mas, González Pons ha explicado que para organizar la consulta, entre otras cosas, se utilizaron fondos públicos y que "eso es claramente un delito" que la fiscalía debe perseguir. También habrá funcionarios que deberán pagar "por las órdenes que recibieron de sus jefes".
El dirigente 'popular' espera que la Fiscalía le pida explicaciones sobre todo ello al presidente de la Generalitat, que no ha cumplido la orden dictada por el Tribunal Constitucional dos veces de suspender cualquier acto dirigido a celebrar una consulta o un proceso participativo sobre la independencia el 9 de noviembre.
"Nadie puede pensar que saltarse la ley es gratis, al que se la salta se le tiene que aplicar", ha subrayado González Pons. "El presidente de la Generalitat de Cataluña no es un español de más categoría que cualquier otro. Espero que el fiscal le llame, me gustaría", ha agregado.
UN PROBLEMA ECONÓMICA
El portavoz europeo cree que en Cataluña no existe un problema político sino un problema económico, que lleva "enmascarado" dos años por el anuncio de la consulta soberanista. Lo que se está "degradando" en Cataluña es la economía y ha esperado que Artur Mas se centre a partir de ahora en ese capítulo o que "alguien" haga que se encargue.
"La economía no sólo puede llevar a la quiebra a la Generalitat sino arrastrar, sino que la quiebra de la Generalitat puede arrastrarnos al resto", ha afirmado.
Y ha defendido la posición del presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, ante el reto independentista catalán, por tener a su juicio "el carácter adecuado para un problema tan difícil como éste".
"Con mano izquierda y derecha, ha desactivado la bomba política que Artur Mas ha puesto en marcha, no se celebró un referéndum ilegal, que era a lo que se había comprometido Rajoy. Estoy convencido de que con esa mano izquierda podrá ayudar a que Artur Mas pueda ocuparse de lo que debe, la situación económica y personal de los catalanes", ha concluido.