Guerra se despide de sus compañeros del PSOE llamando a "enderezar la senda de la crueldad" iniciada con la crisis

MADRID 19 Dic. (EUROPA PRESS) -

El exvicepresidente Alfonso Guerra ha enviado una felicitación navideña a sus compañeros del PSOE en la que se despide tras 50 años en activo, primero como profesor y a partir de 1977 como diputado, y con la que anima a esforzarse para "enderezar la senda de la crueldad" iniciada con la crisis económica y que define como "un calvario" de menos libertad y débil bienestar.

Guerra vivió este jueves su último día como diputado tras 37 años ininterrumpidos ocupando un escaño en el Congreso, y fue objeto de aplausos de reconocimiento tanto en el hemiciclo como en la Puerta de los Leones, donde se fotografió con los diputados y trabajadores del Grupo Socialista encabezados por Pedro Sánchez.

Pero ése no fue su último acto, pues el que fuera 'número dos' de Felipe González ha enviado también una felicitación navideña a todos los diputados y dirigentes socialistas para lanzar un mensaje de despedida a sus "amigos".

A lo largo de los últimos años, esta felicitación navideña --"Una plaquette editada con esmero", asegura-- contenía el texto de un autor con cuyas palabras Guerra se identificaba. Pero esta vez, por ser la última, ha querido ser él quien escriba el texto.

UNA VIDA EN DOS MITADES: DICTADURA Y DEMOCRACIA

En esa felicitación, a cuyo contenido ha tenido acceso Europa Press, Guerra revela que su vida se divide en "dos mitades iguales, 37 años vividos bajo la opresión de una dictadura y 37 disfrutando de una democracia", y dice que ha decidido retirarse "de las actividades más apremiantes" tras cumplir 50 años de trabajo, primero como profesor universitario y después como diputado del PSOE. "Es buen momento para facilitar el paso de otros más jóvenes que muestran ganas de protagonizar este nuevo tiempo", señala.

Según explica, en estos años han cambiado muchas cosas y "las consecuencias más visibles son la entronización definitiva del 'tener' --para unos por carecer del mínimo que garantice la dignidad de la persona, para otros por una acelerada ambición o codicia--, y el debilitamiento de las relaciones entre las personas, delegadas a aparatos e instrumentos". "El tiempo de pensar ha sido sustituido por el afán de llenar el tiempo, quizás para no tener que pensar", se lamenta.

A riesgo de ser "un agur que pinte con negros colores", Guerra considera que el mundo actual es "un calvario de menos libertad y un enteco bienestar", pero cree que hay "esperanza" y que el ser humano, "podrá, con su esfuerzo, enderezar la senda de la crueldad emprendida en los últimos años al cobijo de las dificultades económicas de algunos países".

Guerra, que dejará vacante la Presidencia de la Comisión de Presupuestos del Congreso, espera que sus "gotas de humanidad" hayan resultado útiles en estos últimos años y se despide de sus compañeros expresando "reconocimiento y gratitud por el camino recorrido juntos".