La mayoría de la oposición rechaza de plano la proposición no de ley y lanza severas críticas a Rivera
MADRID, 19 Sep. (EUROPA PRESS) -
La votación de la proposición no de ley de Ciudadanos que busca apoyar al Gobierno de Mariano Rajoy en su estrategia para evitar la celebración en Cataluña de un referéndum sobre la independencia el próximo 1 de octubre ha puesto de manifiesto en el Congreso la división existente en esta cuestión entre los distintos grupos parlamentarios.
El presidente de Ciudadanos, Albert Rivera, ha explicado en el Pleno de la Cámara Baja que el objetivo de su iniciativa es que el poder legislativo exprese su respaldo al poder ejecutivo y al poder judicial "en la defensa de la legalidad democrática en Cataluña", según dice el texto, y ha señalado la importancia de forjar un "amplio consenso" a favor de la proposición.
Aunque el PSOE ha presentado una enmienda, la formación naranja no estaba de acuerdo con uno de los cuatro puntos, el que hablaba de "abrir un espacio de diálogo y buscar una salida pactada y legal" para "desterrar la división y reforzar la convivencia" en España.
Ciudadanos ha presentado una transaccional que, a cambio, planteaba un diálogo para una reforma constitucional, pero finalmente no se ha llegado a un acuerdo. "El PSOE no ha querido retirar el pacto con los nacionalistas y no la podemos aceptar", ha dicho Rivera sobre la enmienda de los socialistas.
La iniciativa ha recabado el apoyo del PP, pero Unidos Podemos, el PNV, ERC y el PDeCAT la han rechazado de plano con severas críticas hacia Ciudadanos.
EL PSOE CREE QUE CIUDADANOS BUSCA DIVIDIR
La coordinadora de los diputados y senadores del PSC, Meritxell Batet, ha calificado de "irresponsable" la iniciativa de Ciudadanos y se ha preguntado si lo que busca Cs es generar frentes y dividir.
Así, "ni suman voluntades, ni proponen soluciones, ni ayudan a la cohesión social y a un diálogo sincero y honesto que vaya al fondo de la cuestión", ha dicho Batet, que ha censurado a los dirigentes independentistas que "se saltan la legalidad y la democracia" pero también ha criticado al Ejecutivo de Mariano Rajoy por haber "contribuido" a que se llegue a la situación actual de crisis.
Lo que se necesita ahora, a su juicio, es "abrir soluciones políticas y crear espacios de diálogo", y por eso ha lamentado que Cs no haya apoyado la creación de una comisión en el Congreso para analizar la situación en Cataluña en el marco de un estudio más amplio sobre el modelo autonómico y su necesaria modernización.
Aunque Rivera ha pedido desde la tribuna que, en favor de la unidad, no se busquen las discrepancias y los matices, los únicos que han manifestado un apoyo claro a la proposición no de ley de Ciudadanos han sido José Antonio Bermúdez, en nombre del PP, e Íñigo Alli, de UPN.
EL PP NIEGA UN ESTADO DE EXCEPCIÓN
Bermúdez ha señalado que se trata de "responder a un golpe al Estado de Derecho y defender la democracia", y ha negado que se esté aplicando un estado de excepción en Cataluña o que se esté reprimiendo a los independentistas, como han denunciado varios grupos de la oposición.
"En democracia nadie tiene el privilegio de cumplir las leyes a conveniencia ni existen espacios de impunidad para nadie", ha subrayado. Además, ha dicho que el Gobierno no permitirá que se celebre el referéndum de autodterminación del 1 de octubre y que, si bien las leyes y la Constitución se pueden modificar, se debe hacer siempre "a través del método democático".
Xavier Domènech (Unidos Podemos), Ester Capella (ERC), Jordi Xuclà (PDeCAT) y Aitor Esteban (PNV) han arremetido contra Ciudadanos por su iniciativa. Así, Domènech ha dicho que Cs no plantea "ninguna solución política", ni siquiera ante la situación de "excepcionalidad que viven Cataluña y toda España".
"Ya basta de perseguir ciudadanos, alcaldes, papeletas y urnas" y "ya basta de adhesiones inquebrantables" al "modelo constitucional", ha indicado antes de definir España como un "país plurinacional" y reivindicar el "derecho a decidir" de los catalanes.
RIVERA, "CRUZADO DEL NACIONALISMO ESPAÑOL"
Por su parte, la representante de ERC ha llamado a Rivera "cruzado del nacionalismo", pero del nacionalismo español, por pretender que los catalanes sigan formando parte de España "a la fuerza". "Nosotros nos declaramos insumisos de su ley y de su Estado de Derecho", ha afirmado, defendiendo que los catalanes puedan elegir entre "una monarquía centralista que se pactó con el franquismo" y "una Cataluña moderna del siglo XXI".
Aitor Esteban ha afeado a Ciudadanos que pretendan ser "más papistas que el Papa" al defender la estrategia del Gobierno y que "lo único" que ofrezcan sea "la fuerza del Estado" pese a que hace años que los catalanes y los vascos reclaman "soluciones políticas y diálogo". "Son ustedes unos maniqueos", ha concluido.
Por último, Xuclà ha reprochado al presidente de la formación naranja que "no le preocupe" que en Cataluña el Estado "prohíba la libertad de pensamiento, de expresión y de reunión" a quienes "se han levantado pacíficamente" para poder votar.