MADRID 12 Oct. (EUROPA PRESS) -
ETA ocultaba en un zulo en Carlepont, a unos cien kilómetros al noreste de París, un importante arsenal con decenas de armas cortas enterradas en bidones y que han sido intervenidas en una operación conjunta entre las fuerzas de seguridad galas y las españolas. El Ministerio del Interior se ha felicitado por el hallazgo de "uno de los zulos estratégicos" de la banda terrorista.
El escondite utilizado por la veintena de terroristas que continúan al frente de ETA se hallaba en un paraje forestal del departamento de Oise. El depósito, que permanecía inactivo, está siendo analizado por las autoridades judiciales del país vecino tras el descubrimiento este miércoles de agentes de la Dirección General de Seguridad Interior francesa (DGSI), que han contado con la información aportada por la Guardia Civil. La operación se ha bautizado como 'Descubrimiento'.
Los investigadores de las fuerzas de seguridad francesas y españolas consideran, según fuentes de la lucha antiterrorista consultadas por Europa Press, que se trata del arsenal con el que la banda terrorista podría tratar de persuadir a los gobiernos de ambos países para escenificar un nuevo proceso de negociación.
También se está analizando si el decomiso guarda relación con el robo de 350 pistolas y municiones cometido por ETA en Vauvert, cerca de Nimes (sureste de Francia), el 23 de octubre de 2006. Estas armas constituirían el grueso del arsenal del que seguiría disponiendo la banda terrorista tras anunciar, obligada por la presión policial, que abandonaba las armas de manera definitiva el 20 de octubre de 2011, hace casi cinco años.
En un comunicado, el Ministerio del Interior ha informado en torno a las siete de la tarde que agentes de la policía judicial francesa continuaban realizando la inspección ocular del zulo y procediendo al inventario y cuantificación del material intervenido. Además, destacaba que la operación pone de manifiesto el "excelente nivel de cooperación hispano-francés, tanto policial como judicial, en materia de lucha contra el terrorismo".
Este martes, el ministro del Interior en funciones, Jorge Fernández Díaz, volvió a cerrar la puerta a cualquier posibilidad de negociación, subrayando que la política en este sentido de Francia está "alineada" con la del Gobierno. "Deben entregar las armas y certificar su defunción haciendo pública su disolución. ETA es una cadáver al que solo le falta expedir su certificado de defunción", aseguró.
Uno de los máximos responsables de la lucha antiterrorista, el coronel Valentín Díaz Blanco, advirtió en julio en el transcurso de los Cursos de Verano de El Escorial que ETA había sido derrotada "sin conseguir nada a cambio". "Si no entregan las armas, habrá que quitárselas", señaló este responsable de los Servicios de Información de la Guardia Civil (SIGC).
VERIFICADORES INTERNACIONALES
La última vez que se consiguió incautar un importante arsenal de ETA fue el 28 de mayo de 2015. La banda custodiaba en Biarritz, ciudad del suroeste de Francia situada a unos 30 kilómetros de la frontera con el País Vasco, 19 revólveres, siete pistolas, más de mil cartuchos de distintos modelos, 3,2 kilos de pentrita y temporizadores artesanales.
En un posterior comunicado, los terroristas calificaron esta operación policial como un "ataque" y criticaron que las fuerzas de seguridad "golpearan el proceso de sellado" de su arsenal, al considerar que impedía su estrategia de negociación diseñada tras la derrota policial y el anuncio, el 20 de octubre de 2011, del fin de la violencia.
ETA reconoció en ese comunicado que se había "atacado el proceso para dejar fuera de uso operativo" el arsenal que mantenía tras su derrota policial, según había acordado con la Comisión Internacional de Verificación. Se trata de un proceso que se desacreditó a sí mismo al ser ignorado por España y Francia y después de episodios como la declaración de integrantes de esta comisión en la Audiencia Nacional.
En sede judicial, reconocieron que los etarras se habían llevado en cajas de cartón las mismas armas que los terroristas habían escenificado que entregaban ante la Comisión Internacional de Verificación.
El último comunicado de ETA fue el pasado 27 de septiembre, coincidiendo con el 'Gudari Eguna' (Día del soldado vasco). La banda terrorista se reafirmó en su cese definitivo de la violencia y censuró que en los cinco años transcurridos no haya sido posible un desenlace como el logrado por las FARC y el Gobierno de Colombia. El pronunciamiento de ETA se llevó a cabo días antes de que los colombianos rechazaran los términos del acuerdo en un referéndum.