Investidura.- Arenas dice a Griñán que "no se ha ganado" la Presidencia porque no cuenta con la "legitimidad de las urnas"

Actualizado: miércoles, 22 abril 2009 15:06

Le plantea que PP no votaría en contra de su investidura si asumiera el compromiso de que Andalucía tendrá elecciones en solitario

SEVILLA, 22 Abr. (EUROPA PRESS) -

El presidente del PP-A, Javier Arenas, trasladó hoy ante el Pleno del Parlamento al candidato a presidente de la Junta, el socialista José Antonio Griñán, que "no se ha ganado" la Presidencia andaluza porque no cuenta "con la legitimidad de las urnas", mientras le llegó a plantear que si se comprometía con que Andalucía tendrá elecciones autonómicas en solitario, el grupo popular no votaría en contra de su investidura. "Le han regalado la Presidencia de la Junta y se la ha regalado un amigo", dijo Arenas a Griñán.

Arenas inició su intervención en el debate de investidura expresando que si bien ha considerado al ex presidente de la Junta y actual vicepresidente tercero del Gobierno, Manuel Chaves, "un mal gobernante", es de justicia que constara en el diario de sesiones de la Cámara el "reconocimiento" a su persona y el respeto a los años que ha dedicado a la comunidad. No obstante, apuntó acto seguido que Chaves "ha roto el contrato de confianza que le unía con los andaluces", al decidir marcharse a Madrid "en el peor momento para las familias andaluzas", dando la "espantá".

El dirigente popular, que lamentó que a estas alturas Andalucía esté en un debate de investidura porque los deseos del presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, y de Chaves "han primado sobre la voluntad en las urnas de más de 4,5 millones de andaluces", manifestó que el ex presidente de la Junta y Griñán "son las dos caras del mismo fracaso y de la misma política" y auguró que con el nuevo jefe del Ejecutivo, el "responsable económico del millón de parados", la Presidencia de la Junta va "a tener menos peso que nunca" porque un "presidente sin urnas no tiene peso político". Para Arenas, Andalucía necesita un "gran cambio", que sólo va a llegar cuando "lo andaluces decidan la alternancia a través de las urnas".

Asimismo, Javier Arenas quiso dejar claro que si bien Griñán va a ser "un presidente legal que cuenta con la legitimidad del Parlamento y el apoyo de su partido", haga lo que haga no contará "con la legitimidad política de las urnas, porque no compareció como candidato a la Presidencia en las últimas elecciones". "Usted no se ha ganado la Presidencia de la Junta porque no se ha pateado los pueblos ofreciéndose como presidente ni tiene el deposito de ilusión que atesoran los liderazgos conseguidos en la calle", dijo Arenas a Griñán, al que auguró que será un "presidente tutelado" que ha llegado "heredando el cargo y sin pagar el impuesto de sucesiones en las urnas".

Respecto al contenido del discurso de investidura que ayer ofreció Griñán ante el Pleno, Arenas dijo que nunca antes había escuchado un discurso con "menos compromisos y más literatura", lo que, a su juicio, "no es un problema de personas, sino de años de gobierno porque está agotado el proyecto socialista".

Para Arenas, el discurso de Griñán, "lleno de retórica y exento de compromisos con el futuro de Andalucía", sólo significa "continuismo puro y duro", ya que el futuro presidente es "corresponsable de 30 años de gobiernos socialistas" y el cambio de palabras ya "no nos puede engañar".

Criticó que Griñán pronunciara ayer ante el Pleno "más 9.000 de palabras" y sólo una fuera "reforma", lo que pone de manifiesto, a su juicio, "que tiene la misma alergia a las reformas que su antecesor". Para Arenas, Griñán representa "un liderazgo distante, ya que conoce bien el G20, pero no conoce media andalucía", cuando Andalucía lo que necesita es un "liderazgo reformista y atrevido".

Para el dirigente popular, Griñán ayer aportó "palabras nuevas y propuestas viejas" porque es "muy difícil" que pueda ofrecer renovación tras 30 años en la Junta, al tiempo que lo acusó de haber "ocultado la crisis como hizo Chaves". Arenas le preguntó cuándo va a presentar en el Parlamento unos nuevos presupuestos de la comunidad porque los actuales están "desfasados y son falsos", advirtiéndole de que mientras no plantee unas nuevas cuentas, disfrutará "de credibilidad cero".

TERRENOS COMUNES

Al margen de las posiciones políticas, Arenas estimó que, no obstante, existe la necesidad de encontrar terrenos comunes en estos momentos de crisis, con lo que propuso a Griñán acuerdos en materia de desarrollo del Estatuto; pacto local; reforma de la administración de justicia; financiación autonómica para que Andalucía sea la comunidad "que más gane", y para la defensa de los intereses de Andalucía en el ámbito de la UE. Le planteó además un acuerdo para "firmar un pacto para el empleo", que sin reformas, "sería una broma y un fraude".

Tras señalar que el PP va a ejercer una oposición "contundente", tratando de evitar en todo momento las descalificaciones personales, dijo que ello es perfectamente compatible con "intentar alcanzar acuerdos". "Estamos dispuestos a arrimar el hombro y a tirar del carro con usted", trasladó Arenas a Griñán, al que exigió al mismo tiempo que ponga en marcha de inmediato "un plan de reformas profundas para Andalucía", al tiempo que el PP le ofrecerá el plan de reformas urgentes que ha elaborado, apuntando que lo primero es atender a las familias sin ingresos en Andalucía.

Para Arenas, sin reformas no hay cambios ni salidas para la crisis, por lo que ofreció a Griñán también un acuerdo para "reformar la educación para varias generaciones". También abogó por una administración "más austera y moderna" y por racionalizar el sector público, mientras defendió una reforma fiscal y la puesta en marcha de un plan de medidas de liquidez para pymes y autónomos.

PREGUNTAS A GRIÑÁN

El presidente del PP-A hizo varias preguntas a Griñán, como si va a "mantener las subastas millonarias de la Junta en entidades financieras mientras empresas están cerrando porque no se les pagan las deudas de la administración"; si su Gobierno va "a ser austero", con reducción de consejerías y de altos cargos, y si iba a "usar el Palacio de San Telmo después de la obra faraónica". De igual manera, le planteó si piensa renunciar a la Ley de memoria histórica, cuando mantiene que la política es presente y futuro y que el pasado hay que dejarlo "en el pasado".

Asimismo, preguntó al futuro presidente si va a "votar en contra de cualquier sistema de financiación en el que Andalucía no sea la comunidad que más gane"; si "va a aceptar el pago de la 'deuda histórica en especies'; si va a hacer algo para que cualquier andaluz, en cualquier sitio de España, pueda estudiar en castellano, o si va a aceptar que las mujeres maltratadas cuenten con un plan de protección individual frente a sus agresores.