Felipe VI les ha dicho que es consciente de los problemas de la investigación en España y la Reina ha destacado la importancia de la cultura científica
OXFORD, 14 Jul. (de la enviada especial de EUROPA PRESS Carolina Jiménez) -
La Sociedad de Científicos Españoles en el Reino Unido (CERU) ha presentado este viernes a los Reyes de España una iniciativa para hacer frente a los retos que plantea el Brexit para la investigación: un programa de financiación tanto para facilitar el retorno a quienes quieran volver a España como para quienes quieran seguir allí desarrollando su labor.
La iniciativa, que han bautizado como "Programa Milla" (por la expresión británica 'recorrer la milla extra'), se centraría en impulsar el trabajo de investigadores españoles en Reino Unido con una financiación que les permita "ir más allá".
La asociación señala que la tarea investigadora necesita "una inversión robusta" y financiación es lo que hace falta para atender los retos que plantea el Brexit: la de los investigadores que deseen volver a España ante los cambios de la legislación migratoria y el hecho de que Reino Unido perderá fondos europeos para investigación.
En Reino Unido trabajan 3.500 científicos españoles en universidades y centros dependientes, y hasta 5.000 si se tienen en cuenta los que están en empresas y otros centros privados.
Los Reyes han recibido en audiencia a una representación de CERU en el Instituto Francis Crick de investigación biomédica, penúltima parada de la visita de Estado de los Reyes a Reino Unido. Inaugurado en 2016 y dirigido por el premio Nobel de Medicina Paul Nurse, allí trabajan 1.500 científicos de más de 70 países, 62 de ellos españoles.
Según ha explicado a Europa Press la presidenta de CERU, Estrella Luna Díez, los Reyes se han mostrado muy interesados en conocer sus aportaciones.
El Rey ha dicho ser consciente de los problemas que tiene el sistema de investigación en España y la Reina ha destacado la importancia de fomentar la cultura científica.
En este punto, la representación de CERU les ha pedido que "abran la Zarzuela a la ciencia" y se involucren en actividades de divulgación científica para niños y jóvenes y en actividades de mujeres y ciencia.
Con todo, el grueso de la conversación --unos 30 minutos entre la charla con CERU y con los trabajadores del Crick-- se ha centrado en el problema de la atracción de talento investigador hacia España y en la incertidumbre que plantea la salida de Reino Unido de la UE.
CERU, que tiene más de 600 miembros, realizó en marzo un sondeo entre sus socios --respondieron 200, en su gran mayoría trabajando en universidades-- que arrojó como conclusiones que más de un 50 por ciento no reúne los requisitos para pedir la residencia permanente británica.
Un 30 por ciento admitía que el Brexit cambiaba sus planes de futuro y un 43 por ciento que ello dependería de cómo evolucionasen las negociaciones para la salida. Entre quienes planean marcharse de Reino Unido, un 59 por ciento prevé establecerse en otro país de la UE y solo un 31 por ciento regresar a España.
RETORNO A ESPAÑA O COLABORACIÓN ENTRE LOS DOS PAÍSES
Para facilitar el retorno a España de quienes así lo deseen, proponen que el Programa Milla haga convocatorias como los contratos Ramón y Cajal y equivalentes, y ofrezca financiación adicional, sustancial y flexible para que los investigadores galardonados puedan impulsar sus propios proyectos de investigación de excelencia.
En segundo lugar, puesto que el Brexit puede dejar sin financiación proyectos británicos y dificultar la colaboración entre España y Reino Unido, la iniciativa parte del hecho de que factores externos, como la disponibilidad de financiación adicional o una red de colaboradores internacionales pueden marcar la diferencia entre el éxito y fracaso de una propuesta científica.
Así, proponen que el programa destine fondos a investigadores españoles en Reino Unido y a colaboraciones con grupos en España.
LOS CONTRATOS CIENTÍFICOS SON CORTOS
Los investigadores están pendientes del acuerdo que finalmente se negocie sobre el estatus de los ciudadanos comunitarios que se queden en Reino Unido. El Gobierno británico ha propuesto un estatuto de "asentado" para quienes cumplan cinco años de residencia permanente en el país -a la UE no le han gustado los pormenores de la propuesta-- pero el problema es que los contratos para proyectos científicos suelen ser más cortos, de dos o tres años.
Según los datos del sondeo que hizo la asociación, solo un 19,5 por ciento de los encuestados dijo tener un contrato permanente, mientras un 28 por ciento tiene contratos que finalizan en 2017, un 21 por ciento en 2018 y un 11 por ciento en 2019.
Así, un 31 por ciento prevé quedarse en el país entre dos y cinco años, un 25 por ciento menos de dos años y un 26 por ciento dice que dependerá de las negociaciones. Un 52 por ciento de los encuestados son investigadores postdoctorales.