MADRID, 21 Nov. (EUROPA PRESS) - La portavoz de Podemos en el Congreso, Irene Montero, ha asegurado este martes que es "evidente" que tanto la declaración unilateral de independencia por parte del Generalitat como la aplicación del artículo 155 y el "autoritarismo del PP" han influido negativamente en la decisión de la Unión Europa de no ubicar la sede de la Agencia Europea del Medicamento (EMA) en Barcelona. "Tanto la independencia como el 155 y la actitud no dialogante del PP evidentemente han tenido su peso", ha sentenciado Montero en la rueda de prensa que ha ofrecido tras la Junta de Portavoces de la Cámara Baja. A su juicio, la decisión de las fuerzas soberanistas de declarar la independencia de forma unilateral y "sin legitimidad" no da "la mejor imagen de país", como tampoco la da "la actitud de un Gobierno de la nación que sistemáticamente ha negado el diálogo". "A mi me apena y a mi grupo también que la imagen de España y Cataluña se vea tan dañada por la actitud irresponsable de unos políticos que no saben escuchar. No hace falta saber si están o no al mismo nivel para saber que eso ha influido en esa decisión", ha afirmado, al ser preguntada sobre el peso que, a su juicio, se ha dado al comportamiento de cada una de las partes que señala como responsables. Frente a esa "irresponsabilidad", Montero ha aprovechado a su vez para destacar la "actitud valiente" del Ayuntamiento de Barcelona al defender esa candidatura. "Habrá que seguir trabajando para que en otras oportunidades se pueda reconocer que Barcelona es una ciudad de paz, de convivencia y cosmopolita y que es plenamente capaz de asumir responsabilidades a nivel europeo", ha reivindicado. "Después de los horribles atentados que vimos en este verano, vimos como la imagen del Ayuntamiento y en concreto de la alcaldesa de Barcelona (Ada Colau) recorría el mundo en términos de dignidad, de valentía, de respeto a los derechos humanos y democráticos, y creo por tanto que esa es la imagen que debemos seguir proyectando", ha defendido. En este sentido, ha hecho un llamamiento a volver a prestar atención a esa imagen y ha defendido que "no es necesario seguir tirándose las decisiones a la cabeza porque es evidente que ambas cosas han influido en que finalmente Barcelona no haya sido la ciudad elegida". Por su parte, el portavoz de En Comú Podem en el Congreso, Xavier Domènech, también ha admitido que el clima político catalán no ha beneficiado a Barcelona en esta carrera y ha lamentado que todas las administraciones estén ahora repartiéndose culpas después de haberse unido para promover la candidatura.