MADRID 26 Mar. (EUROPA PRESS) -
El teniente coronel de la Guardia Civil Daniel Baena, jefe de la policía judicial a cargo de la investigación sobre la organización del referéndum ilegal del 1 de octubre de 2017, ha calificado de "insurreccional" el clima en Cataluña a partir de las actuaciones en Unipost -donde el Instituto Armado se incautó de miles de tarjetas censales- y sobre todo de la operación de registros del 20-S en diferentes sedes del Govern.
Así lo ha señalado este testigo clave ante la sala que juzga el 'procés' en el Tribunal Supremo, incidiendo en la existencia de un antes y un después en el ambiente que rodeó las investigaciones que su equipo de policía judicial llevaba a cabo por orden primero de la Fiscalía de la Audiencia Nacional -desde noviembre de 2015- y después raíz de las diligencias iniciadas en marzo de 2017 por el juez de Barcelona Juan Antonio Ramírez Sunyer.
"Detectamos las cartas de Unipost y ahí ya fue un golpe duro", ha señalado, para añadir que un día después, con motivo de la operación del 20 de septiembre, hubo que montar un dispositivo especial para que los registros no fueran conocidos con anterioridad y las pruebas que se buscaban pudieran ser "difícilmente obtenibles". "A partir de ahí nos poníamos en un clima que podríamos calificar, por objetivos y por número de acciones, de insurreccional", ha añadido.
Dentro de este clima de acciones dirigidas contra la investigación, el teniente coronel ha señalado que se contabilizaron un total de 88 actuaciones contra la Guardia Civil, tan sólo dos antes del 20-S, 84 entre esa fecha y la aplicación del artículo 155 de la Constitución y de nuevo tan solo dos después de dicho momento.
Ha dicho también que la celebración del referéndum no era solo el objetivo, sino "la piedra angular sobre la que pivotaba todo un proceso, la condición 'sine qua non' para la declaración de independencia o para poner al Estado en una situación de conflicto".