MADRID, 4 Sep. (EUROPA PRESS) -
Pedro Agudo, el hasta ahora jefe de Oficina del Director General de la Policía, Ignacio Cosidó, ha justificado su decisión de solicitar el relevo de su cargo para frenar el acoso hacía él con el que se pretende erosionar al propio Cosidó y al Ministerio del Interior que dirige Jorge Fernández Díaz.
"Las razones son dos, la primera el acoso mediático que estoy sufriendo para desgastar al director de la Policía Ignacio Cosidó y al Ministerio del Interior y por motivos personales ya que mi mujer ha tenido una depresión", ha dicho en declaraciones a Europa Press.
Agudo ha argumentado que se trata de "una razón profesional". "Yo vine a ayudar al director de la Policía, no para pelearme con medios por involucrarme en temas que no tengo nada que ver porque son injustos. No me puedo estar defendiendo porque erosionaría al director (Cosidó)", ha insistido.
Recientemente, Pedro Agudo había sido acusado de dirigir, a través de su mujer, una academia de formación que examina y cobra a futuros agentes que preparan la oposición al Cuerpo.
"Sobre esta cuestión, lo único que puedo decir es que la academia se fundó en 2008, yo no tenía nada que ver en ningún cargo político entonces ni de responsabilidad porque estaba en la División de Personal", ha explicado Agudo, quien sí ha reconocido que impartió clase allí. "Pero se ha demostrado que no tenía acciones. Mi mujer tenía acciones, pero era una de las accionistas, no la única", ha precisado.
Además, fuentes consultadas por Europa Press explican que la situación de Agudo en el gabinete de Cosidó se había tornado insostenible en los últimos meses debido a su mala relación con los altos mandos de la Policía Nacional, concretamente con el propio Director Adjunto Operativo (DAO), Eugenio Pino.
Según estas mismas fuentes, guardaba relación con el ex jefe de la brigada de Delincuencia Económica y Fiscal, Jaime Barrado González, investigado por la Unidad de Asuntos Internos de la Policía Nacional como posible filtrador de datos relacionados con la empresa Interligare, la presunta trama corrupta formada por ex altos mandos de Interior.
"Se lo comunique (su deseo de ser relevado) ayer al Director que al principio no quería pero luego, viendo las razones, lo entendió. Él sabía que mi mujer llevaba ya tiempo con problemas y yendo al médico lo que precipitó las cosas", ha concluido.