El juez concluye la investigación sobre las presuntas torturas al activista saharaui Fadel Breica sin procesar a Ghali

Archivo - El líder del Frente Polisario y presidente de la República Árabe Saharaui Democrática (RASD), Brahim Ghali
Archivo - El líder del Frente Polisario y presidente de la República Árabe Saharaui Democrática (RASD), Brahim Ghali - STR/dpa - Archivo
Publicado: martes, 22 noviembre 2022 11:13

No se ha demostrado que el líder del Frente Polisario "ordenara menoscabar la integridad" de Breica "al no existir testimonio directo"

MADRID, 22 Nov. (EUROPA PRESS) -

El juez de la Audiencia Nacional Santiago Pedraz ha acordado la conclusión de sumario en la causa abierta por la querella presentada por el activista saharaui de nacionalidad española Fadel Breica por las torturas que habría sufrido a manos del Frente Polisario, el movimiento liderado por Brahim Ghali, a quien ha decidido no procesar.

En un auto de este mismo martes, al que ha tenido acceso Europa Press, el titular del Juzgado Central de Instrucción Número 5 accede a lo solicitado por la Fiscalía, destaca la ausencia de "indicios racionales de criminalidad" y eleva la causa a la Sala de lo Penal, que deberá decidir si archiva o decide continuar la causa.

El instructor explica que "de las diligencias practicadas no pueden seguirse indicios racionales de criminalidad en relación a los hechos investigados respecto de la comisión de los delitos imputados" por Breica. Así, señala que las testificales practicas se basan en meras referencias no constatadas, concretándose en apreciaciones subjetivas y no coincidentes en casos con las fechas y momentos que se señalan en los hechos.

Y es que, añade Pedraz, no ha quedado constatado que Brahim Ghali "ordenara o participara en orden a menoscabar la integridad del querellante (torturas) al no existir testimonio directo u otra diligencia que lo confirmara".

"Con ello, practicadas cuantas diligencias se han podido realizar para la comprobación del delito, participación que han tenido los investigados y las circunstancias que en su comisión han concurrido y no hallándose indicada ninguna otra, es procedente concluir conforme determinan los artículos 622 y 623 de la Ley de Enjuiciamiento Criminal", concluye Pedraz.

LA DECLARACIÓN DEL ÚLTIMO TESTIGO

Esta decisión del juez llega después de que escuchase el pasado 24 de octubre a Abba Bouzeid, un testigo propuesto Breica que confirmó la denuncia presentada por este último por las torturas que habría sufrido a manos del Frente Polisario. Se trataba de la última diligencia pendiente antes de que Pedraz tomase una decisión sobre el futuro de la causa.

Fuentes jurídicas explicaron a Europa Press que, en su declaración ante el magistrado, Bouzeid dio detalles sobre los presuntos abusos sufridos por Breica, confirmando lo denunciado por el activista en su querella. En la misma, Breica aseguró haber sufrido golpes y descargas eléctricas, entre otras prácticas, mientras se encontraba recluido en centros de detención clandestinos.

En concreto, Breica acusa a Brahim Ghali de delitos de detención ilegal, torturas y lesa humanidad presuntamente cometidos en 2019 en los campamentos de refugiados saharauis de Tinduf. Según relata, al llegar allí agentes del Polisario lo amenazaron para que se fuera pero, lejos de hacerlo, sus protestas le llevaron a los citados centros.

El testigo, que llegó al centro antes que Breica, explicó que no tenía relación con el activista hasta que ambos coincidieron durante su estancia. Allí, y aunque no llegaron a compartir habitación dado que el centro contaba con celdas aisladas, Bouzeid habría sido testigo ocular de las torturas que Breica sufrió, y que se habrían repetido hasta en tres ocasiones distintas.

Bouzeid, un bloguero que escribía en un periódico local, explicó que llegó a departir con el activista durante su estancia en la prisión. Según el relato del testigo, los abusos a los que Breica habría sometido eran incontestables.

LA VERSIÓN DE BREICA

En su declaración ante Pedraz --el 29 de junio de 2021--, Breica insistió en que fue torturado durante seis meses en una cárcel secreta del Frente Polisario, apuntando a Ghali como su máximo responsable. Además, denunció que no sería la única víctima, sosteniendo que la tortura sería una práctica habitual del Frente Polisario entre los refugiados saharauis, al tiempo que reprochó a Argelia que permitiera esto en su territorio.

La querella de Breica era la única que seguía viva contra el jefe del Polisario en la Audiencia Nacional. La sede judicial archivó la formulada por la Asociación Saharaui para la Defensa de los Derechos Humanos (ASADEDH) contra Ghali y otras 27 personas por delitos de genocidio en relación con hechos presuntamente cometidos contra miembros del pueblo saharaui entre 1975 y 1990.

Pedraz señaló sobre esta segunda querella que había una "manifiesta insuficiencia" de indicios que apuntaran a que Ghali participó en las presuntas torturas. ASADEDH denunció que agentes del Polisario, incluido Ghali, y de la seguridad argelina cometieron numerosos abusos, que describían como torturas, en los campamentos de refugiados saharauis ubicados en Tinduf (Argelia).

Ghali declaró en la AN el 1 de junio de 2021 para negar cualquier implicación en las violaciones de los Derechos Humanos de las que le culpan. Su defensa argumentó entonces que, como ministro de Defensa de la República Árabe Saharaui Democrática (RASD), estuvo dedicado "en exclusiva" a la guerra contra Marruecos, por lo que "era ajeno a cualquier centro de detención", donde habrían ocurrido las torturas.

Por su parte, el titular del Juzgado de Instrucción Número 7 de Zaragoza, Rafael Lasala, continúa investigando la entrada de Ghali en España el 18 de abril de 2021, pero enfocada ahora a determinar si el líder del Polisario utilizó un pasaporte falso para identificarse a su llegada al hospital San Pedro de Logroño, donde estuvo ingresado por coronavirus.