León, Palencia y Zamora perderán población hasta 2018 aunque CyL ganará más de 30.000 habitantes, según el INE

VALLADOLID, 21 Ene. (EUROPA PRESS) -

Las provincias de León, Palencia y Zamora experimentarán un crecimiento poblacional negativo hasta 2018 según los datos de la Encuesta de Proyección de la Población de España a corto plazo publicada hoy por el INE y recogida por Europa Press y que pone de manifiesto que la población española superará los 49 millones de personas en 2018.

Según esta encuesta, de las nueve provincias de Castilla y León, hasta 2018 perderán población León, con un descenso de 17.560 habitantes; Palencia, con un descenso de 7.460 habitantes y Zamora, con una pérdida de 9.880 habitantes.

No obstante, los datos de proyección revelan que Castilla y León, en el periodo comprendido entre 2008 y 2018 ganará 30.381 habitantes, ya que la pérdida de población de León, Palencia y Zamora se compensa con los crecimientos que está previsto que experimenten las otras seis provincias.

Así, se estima que Ávila crecerá en 9.820 vecinos hasta 2018; Burgos, en 10.567 habitantes más; Salamanca, en 1.335; Segovia, en 12.872 habitantes; Soria, en 2.807 habitantes y Valladolid en 27.880 habitantes.

Por otro lado, esta encuesta pone de manifiesto que a lo largo de este año los nacimientos alcanzarán un máximo de 500.000, por lo que será el valor más elevado desde 1983 aunque inferior a la cifra alcanzada en 1976 con 677.456 nacidos. No obstante, a partir del año que viene se prevé una reducción del número de nacidos mientras que las defunciones seguirán moderando su crecimiento.

No obstante, uno de los resultados más relevantes de esta proyección es que en la próxima década se estima que las defunciones superarán a los nacimientos en siete comunidades autónomas, entre ellas Castilla y León, que forma parte de este ranking junto a Galicia, Asturias, País Vasco, Extremadura, Aragón y Cantabria.

Esta es la primera vez que el INE difunde los resultados de un ejercicio de proyección de la población en España a corto plazo con el objetivo de proporcionar una previsión de la población que residirá en España y en las diferentes comunidades autónomas en los próximos diez años, así como de la evolución de cada uno de los fenómenos demográficos.