Montserrat tacha de "traidores" a los socialistas, que acusan al PP de "emponzoñar" y "atizar el fuego del conflicto"
MADRID, 13 (EUROPA PRESS)
La proposición de ley del PP para proteger los símbolos nacionales y castigar la exhibición de lazos amarillos y esteladas en espacios públicos ha cosechado este martes las críticas del resto de grupos parlamentarios del Congreso, con acusaciones de demagogia y reproches por fomentar la crispación.
La iniciativa, una de las primeras 'leyes' que registró el PP en el Congreso con Pablo Casado de presidente, ha sido defendida en el Pleno del Congreso por la portavoz del Grupo Popular, Dolors Montserrat, quien la considera "una oportunidad única" de defender la convivencia.
"Tienen una gran responsabilidad, nos van a demostrar si son un partido socialista avanzado que defiende las libertades de todos los españoles, pero si dicen que no, no sólo van a traicionar a la democracia, sino a sus propios principios --ha advertido al PSOE--. No dejen que los independentistas obliguen a la gente a huir de sus pueblos, demuestren que son demócratas. Si dicen no, serán unos traidores".
Esta "proposición de Ley de Defensa de la Convivencia Social, la Neutralidad institucional y los Símbolos nacionales" tiene un doble objetivo: respetar la neutralidad de los espacios públicos, tal y como ha reconocido el Tribunal Supremo en su jurisprudencia, y proteger tanto los símbolos nacionales (el Rey, las banderas de España y de las comunidades, el escudo y el himno) como los oficiales (la bandera europea y las enseñas y escudos provinciales y locales).
"NO QUEREMOS MAESTROS CON LAZOS DE ODIO"
La iniciativa afecta principalmente a las autoridades públicas, tanto los altos cargos como los funcionarios, porque son quienes tienen potestades públicas. "No queremos maestros en las escuelas con un símbolo sectario de odio", ha subrayado Monserrat, que sólo ha recabado el respaldo de su socio electoral navarro de UPN.
Los partidos independentistas han descalificado la propuesta porque, según ha dicho Joan Tardà, de ERC, es "otra vuelta de tuerca para resolver de forma represiva la cuestión catalana". Sergi Miquel, del PDeCAT, ve la iniciativa como "la gesticulación más franquista" que se ha visto en el Congreso en los últimos años y ha vinculado su debate con la proximidad de las elecciones andaluzas.
Para el portavoz del PNV; Mikel Legarda, la ley es "una suerte de Ley de Seguridad Ciudadana bis para los cargos públicos", mientras que la diputada de Bildu, Marian Beitialarrangoitia, la ha tachado directamente de "fascismo".
Unidos Podemos, por boca de la diputada de En Comú Mar García Puig, ha acusado a los 'populares' de "dañar mucho la España que quieren defender" y ha llegado a tachar de "carca" al líder del PP, Pablo Casado. "El PP es un partido podrido hasta la médula --ha añadido el diputado de Compromís, Ignasi Candela--. Con su corrupción, lecciones de patriotismo, ni una".
USAN LOS SÍMBOLOS CUANDO PIERDEN EL PODER
Ni siquiera Ciudadanos apoyó la iniciativa en el debate, aunque al final votó su tramitación. Miguel Gutiérrez, secretario general del grupo parlamentario 'naranja', cree que es una propuesta "demagógica" que el PP "debía de tener en un cajón" y que ahora repesca porque ha perdido la Moncloa. "¿Qué decía el gobierno del PP cuando se pitaba el himno?", ha preguntado.
Además, no entiende que el PP reivindique la no utilización política de los espacios públicos al mismo tiempo que pacta con el PSOE la renovación del Consejo General del Poder Judicial. "No se puede titubear a la hora de defender el espacio común de todos los españoles", ha remachado Gutiérrez.
Por último, el PSOE ha descalificado la iniciativa del PP al considerar que "busca emponzoñar" y "atizar el fuego del conflicto" con este tipo de propuestas.
El socialista Artemi Rallo ha aprovechado para recordar que el 2002, mientras el entonces ministro Federico Trillo izaba la bandera más grande de España en Madrid, en el PP se movían los fondos que se recogen en los 'papeles' del extesorero Luis Bárcenas. "Esa es la doble moral del PP cuando enarbola los símbolos", ha concluido.
Al final, la iniciativa legislativa ha sido desechada por el Pleno del Congreso y no se tramitará en la Cámara.