Avisan del riesgo de que se manipule el voto de dos millones de electores y la incidencia que podría tener en el resultado
MADRID, 18 Dic. (EUROPA PRESS) -
Marea Granate ha criticado que la Junta Electoral Central (JEC) vea en el colectivo de residentes españoles en el exterior "un laboratorio de experimentación" para inaugurar el sistema de voto por Internet, "dada la prácticamente nula repercusión del voto exterior en los resultados electorales".
En su última reunión, el organismo arbitral redactó un informe planteando posibles soluciones a los diversos problemas surgidos en torno al voto por correo con los electores que se encuentran en el extranjero, bien por residir en otros países o bien por hallarse temporalmente fuera de España.
Y entre sus 'recetas' aceptó por primera vez la opción de introducir en España el voto electrónico, pero, eso sí, reformando la ley y como medida "excepcional" y "alternativa" a las vías convencionales del voto por correo o presencial en consulados, que, según apunta, deberían mantenerse a disposición del elector aunque "mejoradas".
Ante este planteamiento, Marea Granate ha realizado un prolijo documento analizando, entre otras cuestiones, la posibilidad de introducir este sistema en España, que no sólo lo considera de "alta vulnerabilidad", sino que además es "insuficiente", "costoso" e "inconstitucional".
RESULTADOS MANIPULABLES
Y es que, según argumenta, este procedimiento de voto podría afectar no sólo al colectivo de migrantes, sino a la democracia en España ante "la potencial cuantía de manipulación de los resultados electorales".
"El nuevo potencial de votos que podría ser interceptados de forma maliciosa es de aproximadamente dos millones, con su correspondiente incidencia con los resultados electorales --explica--. Esto sin contar con los efectos que podría provocar la desconfianza en el sistema democrático en general".
Según detalla Marea Granate en su informe, que recoge Europa Press, existen dos modalidades de voto electrónico: el voto en urna electrónica en consulado/colegio electoral y el voto desde un ordenador personal, sea privado o público. "En ninguna de las dos opciones puede garantizarse la seguridad", advierte, pero el riesgo se multiplica "infinitamente" en el caso de darse acceso al voto electrónico desde el ordenador personal, al estar completamente "fuera del control del Estado".
"Ésta parece ser la modalidad elegida para el voto exterior, ya que la instalación de máquinas electorales en los recintos consulares no ayudaría a paliar una de las grandes barreras del ejercicio del derecho al voto, es decir, la accesibilidad consular", apunta.
Actualmente se pueden realizar trámites paralectorales, como el registro consular o la descarga de papeletas) de forma electrónica, pero Marea Granate puntualiza que ese sistema es "técnicamente muy diferente" del voto electrónico.
NO SE PUEDE AUDITAR
Según sus investigaciones, la garantía, transparencia y, fundamentalmente, la auditabilidad está "muy lejos" de una viabilidad con las garantías mínimas requeridas por un sistema democrático. "En el caso español, la vulneración constitucional es evidente", apostilla.
Marea Granate critica, además, que la Junta Electoral pareciera ofrecer el voto electrónico como "la única y desesperada alternativa" para facilitar el voto de los españoles en el exterior. Sin embargo, recalca que existen "otras medidas que paliarían los actuales principales obstáculos a la abstención involuntaria de la diáspora".
En concreto, cita la derogación del voto rogado la tramitación de registro consular por vía telemática, la descarga de documentación electoral por Internet, así como incluir diversas alternativas en un sistema de votación mixta, donde el elector puede elegir entre varios métodos, como, por ejemplo, la inclusión de la modalidad de voto por delegación que se aplica en Francia.