MADRID, 21 Jul. (EUROPA PRESS) -
El ministro de Asuntos Exteriores y de Cooperación, José Manuel García-Margallo, se ha felicitado este jueves por que se haya "hecho realidad el sueño que había prometido tantas veces", como es la recuperación de la antigua sede del departamento en la Plaza del Marqués de Salamanca.
En su discurso durante el acto de firma de la encomienda de gestión para las obras de rehabilitación del edificio, Margallo ha recordado que sólo una semana después de ser nombrado ministro se comprometió a que el ministerio volviera a la sede que ocupó entre los años 2000 y 2004. Fue en 2005 cuando el edificio se desalojó por su mal estado y, desde entonces, el departamento ha estado dividido en varias sedes.
Pero el jefe de la diplomacia española ha admitido que, debido a los recortes presupuestarios en los inicios del Gobierno del PP, pensó que se "despediría del ministerio sin conseguirlo". Eso sí, los trabajos de rehabilitación se iniciarán con bastante retraso, pues los cálculos que en su día hacían en el departamento era que pudieran empezar a finales de 2014.
IMPLICARSE MÁS EN LA ACCIÓN EXTERIOR
Margallo ha indicado que cuando llegó al ministerio le "sorprendió" la "dispersión de sedes", por lo que ha valorado que una vez rehabilitado el edificio de la Plaza del Marqués de Salamanca los trabajadores del ministerio tener una relación más cercana, hablar más entre ellos e "implicarse más en la acción exterior, que es una actividad colectiva".
El Consejo de Ministros aprobó el pasado mayo la programación presupuestaria para que puedan iniciarse las obras de rehabilitación de la nueva sede del Ministerio de Asuntos Exteriores. El acuerdo contempla la financiación para los años 2017 y 2018 y la preceptiva licencia de obra se tiene desde febrero de 2016. La previsión es que las obras se prolonguen 30 meses.
El edificio contará con una superficie de más de 50.000 metros cuadrados y su uso permitirá ahorrar 9,5 millones de euros anuales en arrendamientos, que es el coste actual de los alquileres de Torres Ágora --donde actualmente se concentra el grueso de las oficinas de Exteriores-- y de otras oficinas en la calle Ruiz de Alarcón que albergan la Dirección General de Asuntos Consulares.
La mudanza a la Plaza de Marqués de Salamanca también permitirá liberar algunos espacios en edificios propiedad del Estado que podrán ser destinados a otros usos públicos.
El edificio, una vez rehabilitado, albergará los servicios centrales del Ministerio y la Secretaría General Iberoamericana (SEGIB), que hoy en día cuenta con un edificio propio en pleno Paseo de Recoletos.
50.455 METROS CUADRADOS PARA 1.214 EMPLEADOS
La nueva sede contará con una superficie construida de 50.455 metros cuadrados y las obras permitirán acondicionarlo de forma óptima, tanto desde el punto de vista de funcionalidad y flexibilidad de ocupación, como de calidad de los servicios e instalaciones, sostiene el Ejecutivo.
Albergará a 1.214 empleados públicos y dispondrá, entre otras utilidades, de salón de actos, sala de eventos, cuatro salas de reuniones, centro de proceso de datos y sala de comunicaciones o sala de crisis, con una zona de atención al público para asuntos consulares y migratorios, así como una guardería infantil con capacidad para cincuenta niños.
Las obras de rehabilitación han sido encargadas al Grupo Tragsa, cuyo presidente, Miguel Giménez de Córdoba, ha definido el proyecto como un "gran reto" para la empresa. El objetivo, ha señalado, es que el Ministerio de Asuntos Exteriores pueda "optimizar los recursos y disfrutar de una sede modernizada y adaptada a sus necesidades".