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BARCELONA, 8 Ene. (EUROPA PRESS) -
El ministro de Asuntos Exteriores, José Manuel García-Margallo, ha dicho este miércoles que era "perfectamente previsible" que la UE respondiera a la Generalitat que la consulta es un tema interno de España y que una Cataluña independiente quedaría fuera de la unión.
En un almuerzo-coloquio de Barcelona Tribuna, organizado por 'La Vanguardia', AED y la Societat Econòmica Barcelonesa Amics del País, ha insistido en rechazar la consulta y ha reiterado que la independencia sería "muy mala para España y muy mala para Cataluña".
Margallo ha advertido al presidente de la Generalitat, Artur Mas, de que "pedir lo imposible es altamente peligroso" en política, y asegura que el Gobierno central tiende la mano al catalán para dialogar y reformar la financiación de todas las autonomías.
Ha precisado que el Gobierno de Mariano Rajoy ni contempla la consulta, ya que "la soberanía pertenece al pueblo español en su conjunto y no a una parte", y ha dicho que este principio de integridad territorial está avalado por el derecho internacional y por los organismos internacionales.
El ministro ha explicado que sigue en pie la oferta de diálogo sin fecha de caducidad que hizo el presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, a la Generalitat, pero ha avisado de que la oferta es para debatir siempre con respeto al Estado de Derecho: "Fuera de la legalidad no se puede discutir de nada, dentro de la legalidad de todo".
Margallo es partidario de reformar la financiación a través de un pacto multilateral entre todas las autonomías, y ha advertido de que un modelo como el del concierto económico sólo es aplicable a los "territorios forales" --Euskadi y Navarra-- por imperativo constitucional, pero no a Cataluña.
El ministro ha señalado los tres principales problemas con los que se encontraría una Cataluña independiente: cómo refinanciar una deuda de 50.000 millones de euros al margen de los mercados; el deterioro de las relaciones comerciales, y la dificultad para encontrar inversiones internacionales siendo un Estado "fuera de la comunidad internacional".
"ESPÍRITU DE LA TRANSICIÓN"
Al preguntársele qué pasará en Cataluña este año, ha citado al escritor Salvador Espriu: "Que los puentes de diálogo sigan abiertos", y ha asegurado que a través de este diálogo y no de órdagos es posible encontrar una solución y reducir la tensión actual.
Sin aludir a Mas directamente, ha hablado de la necesidad de recuperar "el espíritu de la transición" y la vía del pacto, y ha asegurado que la Generalitat encontrará ganas de dialogar en el Gobierno central si el debate es dentro de las leyes.
Margallo ha defendido el argumentario sobre el proceso soberanista catalán que su Ministerio envió a las embajadas y consulados españoles en el mundo, y ha argumentado que lo hizo para garantizar la "unidad exterior", ya que es un cuestión que puede afectar a la imagen de España y a su recuperación económica.
PREGUNTA DE MURIEL CASALS
En el coloquio ha intervenido la presidenta de Òmnium Cultural, Muriel Casals, que le ha planteado a Margallo que la mejor salida para Cataluña es la "democracia y escuchar la voz del pueblo catalán", en alusión a la consulta de autodeterminación.
Margallo ha negado que Cataluña haya sido maltratada por el Estado, y ha reivindicado algunas de las inversiones que se han hecho o se harán como la interconexión ferroviaria con Francia o el Corredor Mediterráneo: "No se ha hecho todo lo que nos hubiera gustado, pero se han hecho inversiones".
BALANZAS FISCALES
Preguntado por si el Gobierno central publicará las balanzas fiscales, Margallo ha dicho que es un complejo porque con unos mismos datos se pueden "construir balanzas al gusto".
Así, ha argumentado que existen cuatro métodos de cálculo y que, con datos de 2009, aplicando estos cuatro métodos darían resultados tan dispares que van desde que Cataluña tiene un déficit fiscal de 16.000 millones de euros hasta que tiene un superávit de 4.000.