MADRID 18 Oct. (EUROPA PRESS) -
El ministro del Interior, Fernando Grande-Marlaska, ha apuntado este viernes que su papel en el viaje que realizó la vicepresidenta de Venezuela a España, Delcy Rodríguez, se "limitó" a cuestiones de seguridad, como valorar si hacía falta escolta o comprobar si había restricciones de acceso por sanciones europeas. Además, ha comparado aquella gestión con la que realizó luego en los desplazamientos recientes del presidente de Argentina, Javier Milei.
"El Ministerio del Interior en todo momento, cuando se le traslada o se le transmite la llegada a suelo español de cualquier mandatario extranjero, sea en viaje oficial, sea en viaje privado, hace las gestiones necesarias", ha señalado Grande-Marlaska.
El titular del Interior ha dicho que la prioridad del Ministerio es saber "si es necesaria la protección a esa persona". "El ejemplo, para que entendáis, es Milei; ha venido el presidente de Argentina en dos ocasiones, en viaje estrictamente privado, no oficial, y se tomaron las medidas necesarias", ha indicado.
El ministro del Interior se ha pronunciado de esta forma tras advertir que no le gusta comentar "cuestiones judicializadas" en la Audiencia Nacional, al ser preguntado por la prensa en un acto en la DGT en qué momento se enteró él del viaje de Delcy Rodríguez y qué papel jugó, ya que su entonces colega, el exministro José Luis Ábalos, sí se desplazó al aeropuerto Adolfo Suárez Madrid-Barajas.
Según Grande-Marlaska, en lo que respecta a Delcy Rodríguez él "en todo momento" ha mantenido la misma versión de que su papel fue la de "comunicar que la vicepresidenta tenía un señalamiento consistente en la prohibición de pisar suelo europeo, espacio Schengen".
"El Ministerio del Interior comunica tal extremo y que esa persona no podrá entrar en espacio Schengen, como finalmente aconteció; y ahí es donde se limita la actuación del Ministerio del Interior", ha terciado.