Millet.- Los auditores sobre el hotel creen que las administraciones confiaron demasiado en el Palau

BARCELONA 17 Sep. (EUROPA PRESS) -

Los auditores designados por el Ayuntamiento para analizar la tramitación urbanística del hotel de lujo del Palau de la Música consideran que el consistorio y la Generalitat "confiaron exageradamente en el interés que marcaba el Palau", y lo pusieron "por encima de otros sobradamente respetables", ha afirmado el representante del Colegio de Abogados Jordi Miró.

En una comparecencia en la tercera sesión de la comisión municipal de investigación sobre la tramitación del hotel, Miró ha dado un toque de atención a los grupos y administraciones que dieron por bueno el proyecto. "Al inicio del procedimiento se fue extremadamente generoso, favorable, con un interés clarísimo, el de la Fundación del Palau", ha advertido.

Según él, la antigua dirección del Palau encabezada por Fèlix Millet impulsó el hotel con la única finalidad de obtener "un incremento de patrimonio económico". Así, ha reprochado que "no se atendió adecuadamente" a los vecinos, contrarios al proyecto. Muchas conclusiones de la auditoría se ven reflejadas en las alegaciones vecinales, escrito que ve "exquisito", ha añadido.

Pese a ser una tramitación técnicamente correcta, los auditores han insistido que en la tramitación urbanística ha sido insuficiente la justificación del interés público en la Memoria para la Modificación del Plan General Metropolitano (MPGM). El hotel se había justificado para que pernoctaran artistas y espectadores.

"Si el Ayuntamiento declara que el hotel vinculado al Palau es de interés público no lo pongo en duda, otra cosa es si está justificado", ha dicho Esteve Corominas, del Colegio de Arquitectos. Si la justificación es insuficiente, y el consistorio no pide más información o el promotor no proporciona la necesaria, la ley impide aprobar el cambio de planeamiento, ha agregado Miró.

Joan Anton Font, secretario del Ayuntamiento de Tarragona y representante del Colegio de Secretarios, Interventores y Tesoreros de la Administración Local, ha resaltado que la propiedad de las fincas del hotel --que el Palau transmitió a Olivia Hotels-- no tiene relevancia jurídica excepto en el Plan de Mejora Urbana (PMU), donde debería haber constado Olivia.

HABRÍA UN TERCERO

Corominas ha defendido que considera que los recursos de la Fundación del Palau no deberían ir destinados a impulsar hoteles, ya que "deberían ir destinados a la promoción de la cultura", por lo que se podía deducir que un tercero explotase el hotel. Ha resaltado una vez más que lo que ponen en duda es la falta de explicaciones sobre las prestaciones que el hotel supondría para el Palau.

De hecho, en el primer convenio del 2006 entre la Generalitat y el Palau ya figura que deberá haber un tercero. En relación a los convenios, que no fueron publicitados, Miró ha visto "muy razonable" consensuar y conocer la opinión de la administración sobre el proyecto, de forma que sus redactores puedan presumir después que no tendrán inconveniente para que se apruebe.

Los grupos han reiterado los argumentos que dieron tras haberse difundido este miércoles la auditoría. ERC, la única formación que no avaló el proyecto, ha criticado por boca de Ester Capella que "no se tuvieron todas las prevenciones" como en otras MPGM, y el también republicano Ricard Martínez ha visto relevante "políticamente y moralmente" el cambio de titularidad a Olivia Hotels.

La opinión de Martínez la han compartido el resto de grupos excepto el PSC, cuyo portavoz, Francesc Narváez, ha dicho que los auditores "desmienten muchísimas de las cuestiones de antes del encargo de la auditoría". Su socio de Gobierno, ICV-EUiA, ha planteado a través del edil Joaquim Mestre que de haberse sabido "todos los extremos vinculados al hotel" hubiesen reconsiderado el interés público del proyecto.

Joan Puigdollers (CiU) y Àngels Esteller (PP) han vuelto a acusar al Ayuntamiento de haber ocultado información deliberadamente. El edil convergente también ha reiterado que existía una 'hoja de ruta' --entre el teniente de alcalde Ramon García Bragado y el arquitecto Carlos Díaz-- que trazaba cómo aprobar el proyecto a partir de los convenios iniciales.

El primer teniente de alcalde y presidente de la comisión, Jordi William Carnes, ha concluido la sesión diciendo que en los próximos días deberá afrontarse el debate sobre el interés público, ya que "es más propio del ámbito político". La comisión volverá a reunirse el 27 y el 28 de septiembre, cuando habrán pasado las fiestas de la Mercè.