BARCELONA 30 Jun. (EUROPA PRESS) -
El alcalde de Barcelona, Jordi Hereu, negó hoy que el Gobierno municipal presionara a la ex concejal del distrito de Ciutat Vella Itziar González por el hotel del Palau que impulsó la antigua dirección de la institución liderada por Fèlix Millet.
Hereu dijo que no ha oído a González afirmar que fue presionada, después de que la ex edil dijese el lunes, en su declaración como testigo ante la juez que instruye el caso del hotel, que fue presionada por el cuarto teniente de alcalde de Urbanismo, Ramon García Bragado. Así lo explicó el abogado Jaume Asens, que representa a las entidades vecinales que actúan como acusación popular.
En declaraciones a Rac 1 recogidas por Europa Press, el alcalde explicó que en un gobierno hay discusión y diálogo para tomar decisiones, y agregó: "Intentar hacer ver que esto son presiones es absolutamente inadecuado. Es evidente que esto no es así".
Reiteró su confianza en Bragado y todas las personas que tiraron adelante la tramitación urbanística "absolutamente transparente" del hotel, y también citó al gerente de Urbanismo, Ramon Massaguer. Además, dijo que responsables como el consejero de Economía, Antoni Castells, y él mismo están "muy tranquilos" porque se dedicaron a apoyar una institución, y resaltó que los convenios son públicos.
Constató que se produjo una ruptura rotunda, y puso como ejemplo del "desencanto y la frustración" el hecho de que una semana antes de estallar el caso Millet en julio de 2009 el Ayuntamiento estuvo a punto de aprobar por unanimidad otorgarle a Millet la Medalla de Honor de la ciudad, decisión avalada por cartas que recibió Hereu y que abarcan todo el espectro social, político y de pensamiento de Cataluña.