MADRID, 11 Jul. (EUROPA PRESS) -
Todos los grupos de la oposición han arremetido este jueves contra el PP por rechazar que el Pleno extraordinario del Congreso de la semana que viene incluya la tradicional sesión de control al Gobierno y que en ella esté presente el presidente, Mariano Rajoy, así como por haberse negado a que el debate en la Diputación Permanente sobre la petición de explicaciones al jefe del Ejecutivo a cuenta del 'caso Bárcenas' vaya a quedar postergado a primeras horas de la noche. A su juicio, con esta decisión que consideran "antidemocrática" el PP "secuestra" el Congreso.
Los grupos parlamentarios habían solicitado en la reunión de la Junta de Portavoces la presencia del presidente en el Pleno de la próxima semana, ya que consideran que su asistencia es imprescindible para que dé respuesta a las últimas revelaciones relacionadas con los llamados 'papeles de Bárcenas'.
También habían reclamado que el punto del orden del día de la Diputación Permanente referido a la petición de comparecencia de Rajoy se adelantara al comienzo de la sesión para que el debate no tenga lugar por la noche, después de todos los informativos.
Pero, el PP ha decidido rechazar todas estas peticiones. Por un lado, justifica que no haya sesión de control la semana que viene porque ese Pleno ya está cargado de una intensa actividad legislativa. En cuanto al debate en la Diputación, han recordado que el orden se fija en función de la entrada de las propuestas en el registro y que las solicitudes de comparecencia de Rajoy fueron de las últimos en plantearse.
Para los grupos parlamentarios, la decisión de que los 'populares' se nieguen a celebrar una sesión de control la semana que viene supone un "grave retroceso democrático" porque, según han recordado, en la pasada legislatura todos los partidos apoyaron la celebración de plenos del Congreso en julio que incluyeran las preguntas al Ejecutivo.
RUPTURA DE UN ACUERDO PARLAMENTARIO
De hecho, han argumentado que en el Pleno extraordinario que la Cámara Baja celebró en julio de 2012, ya bajo Gobierno del PP, hubo interrogatorio a los miembros del Ejecutivo por parte de la oposición. Por eso, han acusado al PP de romper el acuerdo de Mesa y Portavoces suscrito en esta materia por todos los grupos.
La portavoz socialista, Soraya Rodríguez, ha afirmado que el PP ha rechazado la sesión de control y la comparecencia del presidente porque tienen "pánico" a lo que pueda revelar el extesorero 'popular' Luis Bárcenas, pero ha denunciado que con su negativa "han hecho saltar por los aires" el acuerdo sobre los plenos de julio con el objetivo de "proteger a Rajoy". "Bárcenas tiene amordazado a Rajoy, y Rajoy ha decidido amordazar al Parlamento", ha remarcado.
El portavoz de la Izquierda Plural, José Luis Centella, ha acusado al PP de tener un comportamiento "torticero" y de poner el Parlamento "al servicio de blanquear la imagen de Rajoy", en lo que a su juicio, es una estrategia "absurda" que sólo lleva a preguntarse "¿qué teme el presidente?". También ha cargado contra el PP porque considera que con su "absurda estrategia" de "blindar" a Rajoy están dañando la credibilidad de una Cámara a la que tienen "secuestrada".
"ABSOLUTAMENTE INCREÍBLE"
La misma expresión de "secuestro" al Parlamento ha utilizado la diputada de UPyD Irene Lozano, quien cree que este jueves se recordará como el "uno de los días más infames de la historia del Parlamento" por la actuación del PP. A su juicio, los 'populares' "no es que usen su mayoría como un rodillo" es que ya se han situado "cerca de la tiranía parlamentaria", deteriorando profundamente a la institución.
El portavoz adjunto de CiU, Pere Macías, considera que la actuación del PP supone un "grave retroceso democrático", por lo que ha hecho un llamamiento a los 'populares' para que rectifiquen y la semana que viene pueda celebrarse un Pleno con preguntas al Gobierno.
Por su parte, el portavoz adjunto del PNV, Pedro Azpiazu, ha manifestado que le parece "absolutamente increíble" lo ocurrido en la reunión de la Junta de Portavoces y también lo ha definido como "antidemocrático".
"Negar la posibilidad de sesión de control es un ataque a las bases de la democracia. El PP está poniendo en una debilidad tremenda al Estado de Derecho. Es lamentable y exigimos que haya transparencia y que la democracia se refuerce", ha añadido el diputado de Amaiur, Rafael Larreina.