El dirigente Lester Toledo saluda que el nuevo Gobierno apoye las sanciones y avisa de que Maduro solo quiere un "diálogo trampa"
MADRID, 9 Jul. (EUROPA PRESS) -
Leopoldo López Gil, padre del opositor venezolano Leopoldo López, ha pedido al nuevo secretario de Estado para Iberoamérica, Juan Pablo de Laiglesia, una "reunión formal" para hablar de Venezuela y, especialmente, de las condiciones en las que vive en España la "diáspora venezolana", que ha cifrado en unas 300.000 personas.
En declaraciones a Europa Press, López Gil ha subrayado que más de 40.000 venezolanos han pedido asilo en España y ha mencionado el caso de los pensionistas, que llevan más de tres años sin recibir sus pensiones desde Venezuela. "Eso causa muchísimo dolor y transforma a todas estas personas en refugiados, al no tener ningún respaldo de su Estado natal", ha explicado.
También el coordinador internacional de Voluntad Popular --el partido de López--, Lester Toledo, ha confiado en poder verse pronto con responsables del nuevo Gobierno, porque "para los venezolanos es muy importante su posición".
En declaraciones a Europa Press, ambos se han mostrado satisfechos con la posición expresada hasta ahora por el ministro de Asuntos Exteriores, UE y Cooperación. "No va a haber ningún cambio de rumbo en la política exterior sobre Venezuela, cosa que agradecemos", ha dicho López.
"Nosotros juzgamos por los hechos", ha añadido Toledo, recalcando que la última decisión de adopción de sanciones por parte de la UE ya se tomó con el Gobierno de Pedro Sánchez. "Se mantuvo la linea, es una buena noticia para nosotros", ha puntualizado.
En una reciente comparecencia en la Comisión de Exteriores del Congreso, Borrell afirmó que no habría avanzó que no habría un "un cambio radical" de política pero también dejó claro que intentará aprovechar toda oportunidad para alentar el diálogo entre fuerzas políticas en Venezuela. También admitió que hay cierto debate sobre la eficacia de las sanciones, aunque dejó claro el apoyo del Gobierno español al nuevo paquete aprobado por la UE contra 11 dirigentes venezolanos.
Sobre las sanciones, López Gil ha remarcado que Borrell ha dicho que "las que causen algún dolor no deben imponerse", así que "no ha habido ninguna equivocación en la orientación de las sanciones" europeas. "Al contrario, han sido muy leves para el daño que han hecho esos sátrapas", ha dicho.
ZAPATERO, "UN VOCERO DE MADURO"
Respecto a la posibilidad de reanudar el diálogo y preguntado si podría tener algún papel el expresidente José Luis Rodríguez Zapatero, Lester Toledo ha subrayado que con él como mediador no participarían en ningún proceso, porque no le consideran un "mediador imparcial" sino "un vocero del Gobierno de (Nicolás) Maduro".
Y es que, a su modo de ver, aunque el diálogo para resolver conflictos en teoría es algo positivo, el Gobierno de Venezuela solo quiere "un diálogo trampa para tratar de ganar tiempo, comprar oxígeno y venderle a la comunidad internacional unas intenciones que ya se demostró que no son tales".
Toledo ha recalcado que hay más de 400 presos políticos --ha mencionado los casos de Leopoldo López y Lorent Saleh-- y que este fin de semana han apresado a un miembro de Soy Venezuela. "Dialogar es bueno pero este gobierno ha demostrado que no tiene intención de dialogar, que es una dictadura pura y dura que se configuró el 20 de mayo en unas elecciones que no reconoce nadie", ha zanjado.
Para López Gil, Zapatero ha "inventado nuevas reglas para jugar al fútbol": "sin un arquero (portero) que pueda parar el gol y el 'referee' (árbitro) vendido, seguro que la selección española no juega en ese juego", ha señalado.