MADRID, 20 Jul. (EUROPA PRESS) -
La eurodiputada de UPyD Maite Pagazaurtundúa ha recibido este jueves en Madrid el Premio Corona de Esther, que concede la Casa Sefarad en el X aniversario de su creación, por su compromiso en la defensa de la justicia y de la libertad.
En presencia del ministro de Asuntos Exteriores y de Cooperación, Alfonso Dastis, la presidenta de la Comunidad de Madrid, Cristina Cifuentes, y el coordinador general de Alcaldía del Ayuntamiento de Madrid, Luis Cueto, Pagazaurtundúa ha denunciado la marea política tóxica de los nacionalismos identitarios que azota en estos momentos a España y ha apostado por la ciudadanía como antídoto contra el fanatismo.
"España se enfrenta cada pocas generaciones a la necesidad de debatir qué es o cómo puede ser la patria o la identidad política", ha señalado Pagazaurtundúa, quien cree que esto es algo que "está poniendo también ahora en crisis" al país. Asimismo, ha indicado que las figuras políticas tienen un papel esencial para formar "la mejor" comunidad.
"Yo suelo pensar que la mejor forma de comunidad es la que asegura, entre otras cosas, una ciudadanía con autoridades políticas que cumplen y hacen cumplir la ley y donde existe un profundo respeto a la libertad de conciencia. Suelo pensar que la ciudadanía europea que nos falta por construir debe llevar ese mismo sello", ha manifestado.
"LA CIUDADANÍA ES UN ANTÍDOTO FRENTE A LOS POPULISMOS"
En este punto, ha indicado que "la ciudadanía es un antídoto frente a los populismos y formas tóxicas de nacionalismo identitario", y que esta situación es consecuencia de un aprendizaje a través de la historia: "Es la historia del aprendizaje de la libertad de conciencia, del aprendizaje a tolerar a los vecinos que no nos gustan, a los escritores que nos incomodan y a los que rezan distinto que nosotros o no rezan".
"En esa historia, muchos sufrieron. Por eso, me parece de justicia que los descendientes de los sefardíes expulsados tengan el derecho, por ley, de adquirir la ciudadanía española", ha añadido Pagazaurtundúa, quien ha advertido del peligro que suponen los partidos políticos que no contribuyen al bien común.
"Si los poderes públicos o los partidos políticos hablan de no cumplir la ley, si dividen las comunidades, si no suponen un antídoto frente a los discursos del odio, de la exclusión, o de las formas de identidad tóxica es que son parte de una marea de identidad política tóxica. El viento de los nacionalismos identitarios nos azota también ahora, como hace seis siglos, como cuando expulsó a nuestros compatriotas", ha manifestado.
Asimismo, Pagaza ha reflexionado sobre el "valor" de no ser excluido de una comunidad ni olvidado tras haber sufrido el terrorismo de ETA. "He pensado en el valor de que no te excluyan, de que no domestiquen tu conciencia y lo he pensado porque soy vasca y he sufrido la persecución por parte de los que buscaban edificar contra la ley, con terror, una nación fuera de España, rompiendo en dos, pero en mil pedazos, nuestra comunidad y nuestro país", ha expresado.
Maite Pagazaurtundúa ha dedicado decenas de años al activismo por la libertad y los derechos humanos, así como contra el terrorismo y el fanatismo. Ha sido reconocida con diversos galardones, como el Premio Sájarov a los Derechos Humanos en 2000 como miembro de !Basta Ya!. En 2005, formó parte de una candidatura colectiva al Premio Nobel de la Paz y, en 2003, el Gobierno de España le concedió la Medalla de la Orden del Mérito Constitucional.