MADRID, 3 Feb. (EUROPA PRESS) - El diputado vasco y aspirante a la Secretaría General del PSOE Patxi López ha asegurado este viernes que se presenta a las primarias con el objetivo de unir al partido y, por eso, ha asegurado que no va a "enfrentar a unos militantes con otros" ni va a "buscar un choque de legitimidades entre diferentes formas de elección y de decisión", porque la Ejecutiva y el Comité Federal tienen que tener "capacidad y competencias claras para adoptar las decisiones que les corresponden y para rendir cuentas sobre ellas". Así lo ha defendido López en un desayuno informativo organizado por Nueva Economía Forum, al que han asistido, entre otros, el presidente del PSOE de Madrid, Manuel Robles, y su secretaria general, Sara Hernández, así como los portavoces socialistas en la Asamblea de Madrid, Angel Gabilondo, y el Ayuntamiento de la capital, Purificación Causapié. También han estado la secretaria general del PSE, Idoia Mendia, y el líder del PSOE en Murcia, Rafael González Tovar, además de la diputada por Barcelona Meritxell Batet. El único miembro de la Gestora que ha acudido ha sido el balear Francesc Antich. El exlehendakari ha lamentado el "drama interno de división" que ha vivido el PSOE en los últimos tiempos y ha defendido que de esta crisis sólo puede salir pasando página y abriendo un "nuevo tiempo" en el que todo el partido esté unido y que pueda "dejar atrás" el "choque de trenes". Ahora, ha dicho, se trata de que los militantes elijan a su líder y, por eso, ha rechazado hablar de lo que implica el apoyo de las "baronías" a cada candidatura, porque eso "es muy antiguo". De la misma manera, ha defendido que "no hay nadie que sea el referente de la militancia de manera exclusiva", un mensaje que se ha entendido dirigido al ex secretario general Pedro Sánchez por erigirse como el candidato de las bases. Pero López ha lanzado más mensajes al que fuera su compañero y jefe en la dirección del PSOE. Uno de ellos ha sido la defensa de la legitimidad de los órganos de dirección del partido frente a la capacidad de decisión de las bases, que también ha defendido. Preguntado por la propuesta de Sánchez de consultar a los militantes cualquier acuerdo de formación de Gobierno, el diputado vizcaíno ha remachado que "nadie puede buscar un choque de legitimidades" entre militantes y dirección. López ha defendido la consulta directa a la militancia para elegir al secretario general, recalcando que "nadie puede ir hacia atrás en eso", y ha apostado por hacerlo también en momentos "de especial importancia, incertidumbre y división". Pero, a renglón seguido, ha remachado que "una dirección no puede hacer dejación de su responsabilidad", porque es el Comité Federal el que tiene que "dirigir el partido", y no se puede "estar haciendo plebiscitos todos los días". "Nos convertiríamos en otra cosa que no es un partido", ha remachado. A su juicio, hay que "conjugar" ambos ámbitos de decisión. Por su parte, ha asegurado además que, si es elegido secretario general, propondrá que su Ejecutiva envíe a las agrupaciones del partido una vez al año un balance de su actividad y de los objetivos que se propone, para que sea "discutido y avalado" por los militantes. El expresidente del Congreso ha defendido que el PSOE debe "dejar atrás la división y empezar a sumar ideas, voluntades y compañeros" y ha hecho hincapié en que las primarias deben ser "un debate limpio" en el que la búsqueda de la unidad no debe ser "un lema propagandístico". "La unidad no se proclama, se practica, la unidad es el resultado de una cultura democrática dentro de nuestra organización, la unidad se construye aceptando las diferencias internas, la unidad exige reconocer a todos los militantes igual legitimidad en la defensa de sus posiciones", ha abundado. Así, y después de recalcar que él nunca daría un paso en política si piensa que su actitud "divide al Partido Socialista", ha hecho hincapié en que estas primarias no pueden ser "un duelo de suma cero". Por su parte, ha garantizado lo que hará si no gana: "Si Pedro es elegido secretario general, yo me pondré a su disposición". "Si alguien plantea que el que gana las primarias gana todo y el que pierde, pierde todo, no ha entendido ni lo que es una organización democrática, ni lo que necesita el Partido Socialista en estos momentos", ha afirmado, subrayando que el 39 Congreso debe hacerse "para integrar" y no acabar con "vencedores ni vencidos". En definitiva, ha dicho, se trata de "votar para unirlo y no para dividirlo más", porque el objetivo es acercar a los ciudadanos al partido, no alejarlos. "El futuro del PSOE se conjugará en primera persona del plural: nosotros y nosotras, porque si lo hace en singular, no tendrá futuro", ha remachado. López ha defendido que el 39 Congreso es el inicio de "un nuevo viaje" en el que "nadie puede buscar solo y por sí mismo la solución". "Debe ser una tarea colectiva, de todos los socialistas y de todos los que participan en el 'nosotros' político progresista", ha remachado. Por eso, ha explicado que lo que plantea es "la reunificación y la concordia en el PSOE para poder convocar a todos los progresistas a construir juntos un nuevo proyecto de libertad, igualdad y justicia social". Y ha avisado además de que "si alguien busca lo contrario" estará "cometiendo el error" no ya de "su vida", sino de la vida de todos los socialistas. "El PSOE se está jugando el ser o no ser y lo que necesitamos es que todos, juntos y unidos, nos pongamos detrás de un proyecto que concite la implicación y la complicidad de toda la militancia", ha remachado. Aunque no ha querido valorar directamente si Sánchez o la presidenta de la Junta de Andalucía, Susana Díaz, pueden cumplir con este objetivo, sí ha apuntado, aunque no le gusta ponerse "medallas", que tiene "alguna experiencia en cómo intentar integrar". Por lo que se refiere a su proyecto, López ha insistido en que quiere un PSOE asentado en la izquierda "valiente, exigente y transformadora" que dé respuesta a los problemas de hoy. Y, en su opinión, esto pasa por "recuperar el gobierno de la política sobre la economía y por aplicar reglas justas a las relaciones económicas". López ha recalcado que defiende el libre mercado y la libre concurrencia, pero, por eso mismo, apuesta por su regulación por los poderes públicos. A su juicio, además, es necesario "recuperar el gran pacto social por el que se reparte de manera justa la riqueza colectiva entre todos, mediante la distribución y la redistribución". Y para ello, ha dicho, es importante "buscar un Estado fuerte, capaz de cumplir su doble función de redistribución de renta y participación y colaboración en la economía productiva". "Yo no soy un izquierdista peligroso, pero sí soy de izquierdas y quiero un socialismo del siglo XXI que no se resigne ante la derecha, que haga frente, sin complejos, al modelo neoliberal que nos está imponiendo todos sus dogmas de fe", ha explicado. López ha defendido que las cosas se pueden hacer de otra forma y ha subrayado que "entre el asalto a los cielos y la resignación", existe la vía que él defiende. Y como ejemplo, ha propuesto "un Estatuto de los Trabajadores igual para todos los países de Europa, con un salario mínimo igual para todos y unas condiciones laborales que no puedan rebajarse a la medida de los intereses empresariales".