El ministro de Exteriores británico reitera que Londres solo aceptará un acuerdo que satisfaga al Peñón
MADRID, 5 Sep. (EUROPA PRESS) -
El ministro principal de Gibraltar, Fabian Picardo, ha reconocido que están surgiendo cuestiones técnicas díficiles de resolver pero no imposibles en la recta final de la negociación del acuerdo entre la UE y Reino Unido sobre el Peñón, al tiempo que ha apostado por no fijar horizontes temporales para su concreción.
Picardo mantuvo su primer cara a cara con el nuevo ministro de Exteriores británico, David Lammy, este miércoles en Londres, quien le trasladó el compromiso del Gobierno laborista con la conclusión de un acuerdo con la UE que "brinde certeza a Gibraltar".
El ministro reafirmó a Picardo el apoyo de Londres "en todas las eventualidades" y le reiteró que solo aceptarán un acuerdo "en los términos con los que esté contento Gibraltar", según trasladó él mismo en un mensaje en redes sociales.
También el ministro principal se mostró satisfecho del resultado del encuentro y del grado de conocimiento de Lammy de las cuestiones que más preocupan a Gibraltar en el marco de la negociación en curso con Bruselas, según ha explicado él mismo en declaraciones al diario 'Gibraltar Chronicle", recogidas por Europa Press, felicitándose de que no haya habido cambios con la llegada de los laboristas a Downing Street.
LA NEGOCIACIÓN, "UNA MONTAÑA RUSA"
En cuanto a la negociación, el ministro principal ha reconocido que es "una montaña rusa". "Hay cosas en las que estamos progresando bien y cuestiones que se están volviendo más difíciles a medida que los aspectos técnicos de las mismas se vuelven más aparentes en la mesa de negociación", ha explicado.
De lo que se trata, según Picardo, es de llegar a un acuerdo en el que todos ganen: Gibraltar, Reino Unido, España y la UE. Y eso pasa por respetar las "líneas rojas" de todos, lo cual "no es fácil". "Estamos muy cerca en algunas áreas pero en otras los nuevos aspectos técnicos que están apareciendo están volviendo a hacer difícil pero no imposible llegar a ese acuerdo en el que todos ganen", ha subrayado.
Por otra parte, Picardo ha rechazado hablar de un "horizonte temporal" en la negociación ante el relevo previsto en la Comisión Europea, que es la que negocia el acuerdo en nombre de los Veintisiete, y la entrada en vigor en noviembre del nuevo sistema automático de control de las fronteras de la UE que afectará a Gibraltar.
Hablar de plazos sería como "poner un nudo corredizo que empezaría a apretar en el cuello del equipo negociador de Gibraltar", ha considerado, al tiempo que ha incidido que ya ha habido otras "cuestiones en el horizonte" durante la negociación y siempre se planteaba que era "el borde del precipicio".
"No veo ningún borde del precipicio pero por supuesto puede haber cuestiones en el futuro que compliquen más las cosas, de forma práctica y logística", ha reconocido, insistiendo en que "hay que seguir negociando sin fijar un límite temporal que pueda complicar más la negociación para los gibraltareños".
ALBARES Y LAMMY NO HABLARÁN SOLO DE GIBRALTAR
En otro orden de cosas, el ministro principal ha rebajado las expectativas en cuanto a la reunión que se espera que mantengan próximamente en Londres el ministro de Asuntos Exteriores, José Manuel Albares, con su homólogo británico, tras un primer contacto en los márgenes de la cumbre de la OTAN en Washington en julio.
"No será sobre Gibraltar", ha recalcado Picardo. "No aceptaríamos un encuentro bilateral entre Reino Unido y España sobre Gibraltar", ha asegurado, incidiendo en que la reunión servirá para "tratar otras cuestiones" aunque también será una oportunidad para que Lammy pueda plantear a Albares algunas de las cuestiones que él y el ministro británico considera "importante" que se aborden en este primer encuentro.