El lunes arranca el juicio contra la estructura desarticulada en 2014 que captaba, radicalizaba y enviaba a fieles a combatir
MADRID, 9 Jul. (EUROPA PRESS) -
La Audiencia Nacional juzga a partir de este lunes a siete miembros de una célula yihadista desarticulada en mayo de 2014, --entre los que se encuentran dos exmilitares del Ejército español-- y para los que la Fiscalía pide un total de 72 años de cárcel por haberse dedicado durante cerca de 10 años a captar y enviar voluntarios a combatir en el Estado Islámico.
El fiscal atribuye a los acusados (todos naturales de Melilla pero con ascendencia árabe) delito de integración en organización terrorista y pide diez años para seis de ellos y doce para el presunto líder de la trama M.A.M, alias 'Doberman'.
Entre los miembros de la célula se encuentran dos de ellos que abandonaron el Ejército español tras el proceso de captación y radicalición en el seno de esta estructura, según el escrito de acusación del Ministerio Público. Uno de ellos, hermano del cabecilla de la célula, murió en combate en 2016.
La célula actuaba en distintas fases: la primera captando a personas susceptibles de ser radicalizadas y la segunda mediante un "adoctrinamiento exhaustivo" que incluía entrenamiento físico. Para ello el líder, cuya ascendencia sobre el resto de subordinados era "absoluta", acondicionó el garaje de su vivienda con máquinas de musculación y artes marciales.
El fiscal apunta en su escrito de acusación que en los registros a los domicilios se incautaron de numeroso material sobre cómo fabricar armas biológicas, así como documentos en árabe donde se habla de 'La reconquista de Al Ándalus'. Además, en el disco duro del ordenador del líder de la célula se hallaron más de 170 documentos sobre preparación de yihadistas para el combate y adoctrinamiento para la justificación de 'operaciones de martirio' (acciones suicidas).
INSTAURAR LA SHARIA EN ESPAÑA
Otra de las actividades de la célula, que el fiscal enmarca en un movimiento global yihadista violento, fue la creación de un aparato de propaganda para la captación de fieles utilizando para ello más de una decena de canales en Internet. Entre ellos interactuaron mensajes "orientados a aumentar la comisión de ataques terroristas" mediante la interpretación de pasajes del Corán.
Entre el material publicado destaca un vídeo que comienza con una autodeclaración de la 'Sharia4Spain' (Sharia para España) destinado a restablecer este movimiento en países democráticos. Además exhiben imágenes de atentados terroristas cometidos en los que se añaden comentarios de aprobación.
Los acusados, en prisión provisional desde su detención, conseguían financiación para actuar simulando accidentes de tráfico entre sus vehículos, lo que permitió en alguna ocasión cobrar indemnizaciones de las compañías aseguradoras por los daños materiales o personales que dijeron haber sufrido.