Foto: MINISTERIO DEL INTERIOR
MADRID, 14 Nov. (EUROPA PRESS) -
El grupo de doce etarras y una integrante de los GRAPO sobre los que Audiencia Nacional decidirá hoy sobre su continuidad en prisión tras la derogación de la 'doctrina Parot' suman un total de 63 condenas por asesinato, según los datos recopilados por Europa Press. En este grupo se encuentran históricos de la organización criminal como 'Kubati', el asesino de 'Yoyes' y otras 20 personas más o la ex integrante del comando Madrid, Inmaculada Noble, compañera de De Juana Chaos, Inés del Río y Antonio Troitiño. En caso de que salieran todos de prisión, ya serían 24 terroristas libres desde la sentencia de Estrasburgo.
Sólo el etarra Gonzalo Rodríguez Cordero, detenido en 1993, ha sido condenado por participar en 19 asesinatos. El primero de los atentados que perpetró fue en el año 1988 y en él fallecieron un directivo de Radiotelevisión Española y un niño de dos años y medio. Actualmente se encuentra interno en la cárcel de Herrera de la Mancha.
En los sucesivos años, Rodríguez Cordero también participó en otros atentados con numerosos fallecidos, como el perpetrado en la plaza de la Cruz Verde de Madrid contra un vehículo militar, en el que fallecieron cinco personas, o un coche-bomba que explotó en Madrid al paso de una furgoneta militar provocando seis muertos. El etarra cumple precisamente este año su condena, aunque con la 'doctrina Parot' hubiera permanecido en prisión hasta 2023.
Otro de los terroristas que podría ser excarcelado este jueves es José Antonio López Ruiz, alias 'Kubati', que suma 21 víctimas en su 'currículum' criminal. 'Kubati', que lleva 26 años en prisión, está condenado a 1.210 años y once meses y estaría en libertad desde el año 2006 de no ser por la 'doctrina Parot'. Entre otros asesinatos, fue condenado por el de la disidente etarra María Dolores González, 'Yoyes', o el del general de Brigada Rafael Garrido, su mujer y su hijo, además de una mujer que transitaba por la zona y falleció a causa de las heridas producidas por la bomba.
También cumple condena por su participación en la muerte de 'Yoyes' otro de los etarras para los que la Fiscalía ha pedido la excarcelación, Juan Mari Gabirondo Agote. Cumple 124 años de condena en la prisión de A Lama (Pontevedra) condenado por dos asesinatos. Hubiera salido de la cárcel en el año 2007 de no ser por la doctrina anulada por el TEDH.
NOBLE, MIEMBRO DEL 'COMANDO MADRID'
Entre los etarras que podrían salir de prisión se encuentra también Inmaculada Noble, que era compañera de comando de Inés del Río Prada, José Ignacio de Juana Chaos (del que era pareja sentimental) y Antonio Troitiño, integrantes del 'comando Madrid' con más asesinatos. Junto a ellos fue condenada por el atentado con coche bomba en la calle de Juan Bravo de Madrid donde en 1986 asesinaron a cinco guardias civiles e hirieron gravemente a otros cuatro.
El mismo grupo de etarras asesinaron meses después a los militares Sáenz de Ynestrillas, Casilla Martín y Carlos Vesteiro en las inmediaciones del estadio Vicente Calderón. Por estos hechos también fue condenada Noble, que suma 325 años de pena por los que ha pasado 26 en la cárcel. Actualmente se encuentra en la prisión de Algeciras y de no ser por la aplicación de la doctrina Parot, estaría en libertad desde 2008.
José Félix Zabarte Jainaga es otro de los etarras sanguinarios de este grupo. Fue condenado a 262 años de condena y un día por siete asesinatos, entre ellos, el del Policía Nacional Julio Segarra en Bilbao en 1983, quien fue asesinado junto a su esposa embarazada, según los datos recogidos por Europa Press. Se encuentra en la cárcel de Puerto III en Cádiz donde se agrupa a los etarras más irrendentos. Ha pasado los últimos 27 años en la cárcel. Estaría en libertad desde 2008 de no ser por la aplicación de la doctrina ahora derogada.
Por su parte, Francisco Lujanbio, preso en Herrera de la Mancha (Cuidad-Real), cumple 124 años de cárcel por numerosos delitos, entre ellos dos asesinatos. Lujanbio no debía abandonar la cárcel hasta el próximo año en cumplimiento de la Parot, sin la cual hubiera salido de prisión en 2008.
También podría abandonar la cárcel este jueves Josu Díaz de Heredia Ruiz de Arbulu, con una víctima en su haber y que cumple 45 años de condena en la cárcel de Topas (Salamanca). Díaz de Heredia hubiera salido en 2009 sin la Parot, con cuya aplicación no hubiera abandonado la cárcel hasta 2016.
Mitxel Turrientes Ramírez fue condenado a 55 años de cárcel por diversos delitos terroristas entre el que se encuentra el asesinato de un guardia civil retirado en Lasarte (Guipúzcoa) en 1985. Ha pasado 27 años en prisión y si no se le hubiese aplicado la doctrina Parot estaría en libertad desde hace cinco años y medio. Actualmente se encuentra en la cárcel de Herrera de la Mancha (Ciudad Real).
Por su parte, Pedro Juan Odriozola Aguirre fue condenado a 162 años de cárcel y un día. Entre su historial criminal se encuentra el asesinato de un guardia civil en 1979 en Tolosa. Ha pasado 25 años en prisión, aunque hubiera abandonado la cárcel hace siete años si no se le hubiera aplicado la doctrina Parot. Se encuentra preso en Zuera (Zaragoza).
SÓLO TRES SIN VÍCTIMAS MORTALES
Sin condenas por víctimas mortales, cumple 189 años de condena en Monterroso (Lugo) el etarra Kepa Rezábal Zurutza por delitos como asesinato frustrado, atentado, detención ilegal o tenencia de explosivos. Rezabal cumplió su pena en el año 2006 sin la 'doctrina Parot', en aplicación de la cual no hubiera salido hasta 2017.
Maritxu Urkudun Etxenagusia es otra de las pocas de este grupo que no cuenta con víctimas mortales en su historial delictivo. Pese a ello fue condenada a 73 años y cinco meses de cárcel por diversas actividades relacionadas con ETA. Tras 22 años en la cárcel podría salir próximamente de la prisión de Granada en la que se encuentra. De no ser por la Doctrina Parot, habría salido en libertad en 2009.
Tampoco cuenta con víctimas mortales Antonio Alza, cuya salida de prisión no estaba prevista 2018 en virtud de la 'doctrina Parot'. Alza cumple condena en la cárcel alavesa de Nanclares de Oca, donde imparte clases de español para otros internos extranjeros para hacer frente a sus deudas con el Estado en concepto de responsabilidad civil por los crímenes cometidos durante su etapa como terrorista. Sería el primero de los acogidos a la denominada Vía Nanclares en quedar libre tras la sentencia de Estrasburgo. Se encuentra desde hace años desvinculado de ETA.
En este grupo de presos terroristas se encuentra una integrante de los GRAPO, Olga Oliveira, interna en la cárcel de Granada. De 53 años de edad, fue detenida en 1990 por lo que lleva 23 años en prisión en los que ha llevado a cabo varias huelgas de hambre. Fue condenada por el asesinato del coronel Manuel López Muñoz el 15 de junio de 1990 en Valladolid.